Scarlet Nexus, impresiones. Acción desenfrenada en un futuro brain punk

Bandai Namco alberga en su catálogo un buen número de obras que surgen a raíz de sagas de manganime reconocidas, además de nuevos títulos centrados en la estética anime. Este es el caso de Scarlet Nexus, una prometedora nueva IP que llegará el próximo 25 de junio a PC y consolas PS4, PS5, Xbox One y Xbox Series X/S. Tras entrevistar al director y productor de la obra el pasado verano, ahora hemos tenido la oportunidad de jugarlo durante unas cuantas horas para averiguar de primera mano cómo arranca esta aventura de acción situada en un futuro distópico a la par que apasionante. Os lo contamos.

Poderes psiónicos en un mundo brain punk

Los avances científicos y tecnológicos nos demuestran día tras día que la realidad supera la ficción y que eventos que antaño creíamos imposibles acaban por materializarse ante nuestros ojos. Sin embargo, lo planteado en Scarlet Nexus sí se escapa de la línea viable y realista (al menos hasta la fecha). Su historia se centra en un futuro lejano en el que se ha descubierto una misteriosa hormona psiónica en el cerebro humano que es capaz de conceder poderes extrasensoriales a las personas. Por supuesto, un descubrimiento de este calibre cambia para siempre el mundo tal y como lo conocíamos.

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A pesar de que no todos los humanos tengan la capacidad de dominar estas habilidades especiales, no tarda en surgir la necesidad de crear cuerpos de fuerzas especiales compuestos por usuarios de los poderes psiónicos. El motivo se encuentra en la aparición de los Alter”, un grupo de mutantes trastornados (con diseños originales propios de una versión de pesadilla de Alicia en el País de las Maravillas), que comienzan a descender del cielo, hambrientos de cerebros humanos. Con esta característica propia de los zombies, este peligroso grupo de enemigos no tarda en asolar parte del mundo, por lo que las Fuerzas de Supresión de Alter (FSA), última línea defensiva de la humanidad, deben entrar en acción.

Kasane o Yuito, escoge a tu protagonista

La primera elección que debemos hacer como jugadores es elegir al protagonista que nos acompañará durante la aventura. Es algo común en buena parte de las obras del medio, pero en Scarlet Nexus no se limita tan solo a un skin masculino o femenino, sino que cada uno de ellos tiene un carácter y trasfondo propios. Por un lado tenemos a Yuito Sumeragi, un joven que proviene de una familia importante y cuya personalidad destaca por ser optimista, feliz y amable. Por otro lado está Kasane Randall, una estudiante modelo que se desvive por proteger a su hermana, Naomi.

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Tras jugar el arranque de la historia con ambos podemos afirmar que hay ciertos cambios significativos respecto a la historia, el enfoque a la hora de contarla y la personalidad de los protagonistas. Si bien es cierto que la base es la misma, merece la pena conocer ambas versiones con tal de descubrir todos los matices y perspectivas que nos perderíamos si escogemos tan solo a uno. Pero esto ya es terreno de rejugabilidad y de preferencias personales de cada tipo de jugador.

Un amplio abanico de poderes mentales y físicos

A los mandos, Scarlet Nexus se siente satisfactorio y progresivo. Con esto nos referimos a que al principio nuestros poderes y habilidades estarán bastante limitadas hasta el punto que tendremos tan solo un salto y apenas capacidad de esquiva. Sin embargo, el componente JRPG del título sale a relucir en cuando avanzamos unos cuantos compases, permitiendo así ampliar en gran medida nuestro árbol de habilidades y personalizarlo al milímetro. Con tres ramas principales: Expandir, Mejorar y Soporte, podremos conseguir incrementos de vida, armadura, daño, movimiento y mucho más.

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Lo mencionado no es una novedad en el género, pero donde recae la verdadera capacidad de innovación del título es en sus habilidades psicoquinéticas y en cómo nos permiten interactuar con el entorno. Nos brindan la opción de hacer levitar prácticamente cualquier elemento del escenario (bancos, farolas, carteles, bocas de incendios, etc.) y lanzarlo contra los adversarios que se crucen en nuestro camino. Esta posibilidad añade un importante punto estratégico a la mezcla, ya que a medida que nos enfrentemos a distintos tipos de Alter aprenderemos cuáles son sus debilidades y podremos aprovecharlas a nuestro favor. Un ejemplo de ello es lanzarle un tanque de agua a un enemigo eléctrico, para poder así causar un efecto mojado que se mezcle con las chispas que produce su propio cuerpo y cause una cantidad de daño considerable.

Yuito y Kasane no están solos en las FSA, ni mucho menos. Un buen puñado de personajes con un aspecto al más puro estilo anime les acompañan en cada misión para echarles una mano y aportar poderes distintos. Elektrokinesis, invisibilidad temporal, fuego y mucho más nos espera en cada uno de nuestros compañeros de escuadrón, a quienes podemos escoger libremente en determinadas misiones para que nos acompañen a realizar tareas secundarias o bien para progresar en la historia. La capacidad de poder tomar prestados sus poderes de forma temporal para combinarlos con los de los protagonistas es algo que da mucho juego y acaba por resultar divertido y satisfactorio a los mandos aunque en un inicio pueda parecer un tanto abrumador.

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Los llamados “Episodios de Vínculo” nos permiten estrechar nuestra relación con los compañeros de equipo, algo que funciona principalmente para poder conocerlos mejor, además de mejorar sus poderes y por ello su conexión mental con nuestros protagonistas. Los que hemos probado en la demo nos han parecido bastante sencillos y lineales, pero no por ello carentes de interés. Aun así, esperamos que a medida que avancemos en la aventura estas relaciones se tornen un tanto más complejas y vayan más allá de la línea que delimita el compañerismo entre camaradas de escuadrón con la verdadera amistad.

Durante nuestra sesión de juego pudimos luchar contra un par de jefes finales en unos enfrentamientos en los que el desafío resulta mayúsculo y por ello tendremos que demostrar todo lo que hemos aprendido en el camino hasta allí. Además de todo el arsenal de armas cuerpo a cuerpo y habilidades psiónicas mencionadas, también podremos entrar en una especie de “modo frenesí” si logramos causar una cantidad suficiente de daño a nuestro adversario. Como os podéis imaginar, se trata de un estado en el que nos volvemos más fuertes, rápidos y resistentes durante un período de tiempo determinado, esencial para dominar sobre todo los combates más complicados.

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A los mandos todo este sistema de combate se siente bastante satisfactorio, aunque ciertos movimientos podrían estar mucho más pulidos. Por supuesto, no todos los estudios pueden tener la maestría que logran confeccionar compañías como Platinum Games, pero aun así lo que propone Scarlet Nexus se ejecuta bastante bien en pantalla. Es probable que nos tome unas cuantas batallas el acostumbramos a sus sistemas, pero una vez lo logremos seremos imparables y disfrutaremos al derribar a cada adversario que se nos cruce.

Puro anime a través de la pantalla

Desde el diseño de los personajes hasta su estilo de argumento pasando por detalles tan relevantes como el disponer de una escena de introducción al estilo opening, todas las claves de Scarlet Nexus apuntan al anime. Se trata de una nueva IP, pero aun así se siente consistente y con un mundo rico en detalles. Un par de símiles que podemos establecer, en general, son Astral Chain y Code Vein, obras que nos recuerdan bastante a la que nos ocupa por su planteamiento, estética y ciertas mecánicas.

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Desde Bandai Namco detallan que los escenarios futuristas por los que paseamos en el juego se inspiran en los animes clásicos y en la ciencia ficción occidental, algo que notaremos a medida que la historia progrese y vaya ganando empaque. Su apartado artístico reúne todos estos elementos y los convierte en algo con personalidad propia. Gráficamente no es nada del otro mundo, y más si tenemos en cuenta que saldrá también en consolas de nueva generación, pero aun así se ajusta bien al estilo que busca y por ello mantiene bien el tipo.

En cuanto a su apartado técnico no podemos entrar en detalles concretos por ahora, ya que nuestra sesión de juego fue a través de la plataforma de streaming conocida por el nombre de Shadow y esto causó que hubiera cierto lag y caídas de FPS al jugar. Aun así, no nos topamos con bugs ni errores graves a lo largo de las más de seis horas que pasamos a los mandos de Scarlet Nexus. Por último, y no por ello menos importante, su apartado sonoro destaca por una banda sonora compuesta por temas de música electrónica y dubstep (sí, parece que hayamos retrocedido unos años en el tiempo) y un elenco de voces en inglés o japonés (lo recomendamos porque casa mejor con el tipo de juego que nos ocupa) de gran calidad. Cabe mencionar que llegará totalmente traducido al español en su lanzamiento.

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Todavía es pronto para valorar la propuesta en su conjunto global, pero las impresiones que nos deja tras unas cuantas horas a los mandos son bastante buenas. Si bien es cierto que no notaremos una revolución significativa de las mecánicas jugables ni una historia y personajes inolvidables (al menos todo apunta a ello), sí que sentiremos que se trata de un juego divertido y satisfactorio, ideal para los amantes del anime que quieran descubrir un título nuevo con el que dar la bienvenida al verano.