NieR Replicant ver.1.22474487139...: comparativa e impresiones
Ya hemos jugado en profundidad al remake del clásico de Yoko Taro, rejuvenecido por Toylogic para acomodarse mejor a los fans de NieR: Automata.
No es controvertido decir que Demon's Souls y Xenoblade Chronicles: Definitive Edition fueron dos de los juegos más destacados de 2020 a pesar de que cualquiera de ellos tenga, al menos en su origen, una década a las espaldas. Restaurar clásicos dista de ser una práctica nueva, podemos remontarnos a casos como Super Mario All-Stars o Ninja Gaiden Trilogy de SNES (recopilatorios con juegos de NES adecuados a las capacidades 16-bits) para verlo. Pero en tiempos recientes, el híbrido entre remaster y remake ha evidenciado ser un valor seguro si la obra en cuestión tiene una buena base de fans. Frente a los que lanzan casi lo mismo en HD y los que arriesgan con una reimaginación completa, esta clase de reconstrucciones selectivas permiten modernizar juegos sin poner en peligro lo que los hizo especiales en primer lugar. Aunque la clave tiende a ser esa: si no triunfó en su día, ¿para qué molestarse?
El caso de NieR Replicant ver.1.22474487139... (el nombre se las trae), no obstante, es algo atípico. La versión de PS3 y Xbox 360 estrenada en 2010 distó de ser un gran éxito y, en condiciones normales, seguramente habría quedado relegada al olvido o a algún relanzamiento digital poco ceremonioso. Pero pocas cosas en torno a Yoko Taro son normales, y tras el excelente rendimiento de NieR: Automata en todos los frentes (buenas críticas y más de 5 millones de copias vendidas), el original ha sido recuperado por Square Enix para ser uno de los broches de oro de la generación de PS4 y Xbox One (sin perderse tampoco lanzamiento en PC). NieR ha vuelto a la mesa de trabajo y los artesanos de Toylogic —en colaboración con algunos miembros clave de Platinum Games— lo han tratado a fondo. Gráficos, controles, contenido. Y tras varias horas jugando, podemos asegurar ya que la transformación es muy positiva.
Segunda juventud
Lo primero que entra por la vista, naturalmente, es el intensivo lavado de cara gráfico realizado por Toylogic. Como dicen que una imagen vale más que mil palabras, para ilustrarlo iremos adjuntando a lo largo de este texto varias parejas de capturas equivalentes (ampliables si las pincháis) entre la versión original de PS3 —la que teníamos más a mano— y la nueva que se lanzará el próximo 23 de abril.
Como podéis apreciar, el diseño general se preserva: técnicamente, Toylogic no ha construido escenarios “nuevos”, sino que ha modificado los existentes. Pero en algunos casos lo ha hecho hasta tal extremo que el término remake no queda demasiado fuera de lugar. La geometría es más compleja, las texturas tienen más resolución, se han añadido nuevos elementos a los escenarios y la iluminación también se ha retocado de forma considerable. Aunque la diferencia sea más o menos perceptible según la zona, todo ha recibido un tratamiento exhaustivo para que revisitarlo —o descubrirlo— sea una experiencia grata incluso después de Automata.
De hecho, una de las directrices principales del estudio parece haber sido precisamente acercar su estética a la del propio Automata, algo apreciable en algunos modelados principales, la saturación de los colores y la luminosidad (corrigiendo de paso ciertos excesos con el bloom lighting que a veces padecía el original). Puede ser una decisión cuestionada por los fans más puristas, pero que desde luego es efectiva a la hora de encajarlo mejor como precuela que comparte universo —aunque sea de forma lejana en el tiempo y ambas entregas se puedan disfrutar de forma independiente—.
Con esto tampoco queremos decir que camufle por completo sus orígenes. Ya Automata, pese a estar creado desde cero con las especificaciones de PS4, destaca más por su dirección artística que por el músculo técnico en sentido estricto, y Replicant, además de compartir esa característica, evidencia mayor sencillez en la construcción y densidad de los escenarios, así como en los personajes —a gran nivel cuando se trata de los principales, pero no tanto en el caso de secundarios—. Aun así, son pegas menores en el contexto de una labor de restauración más que elogiable.
Se ve mejor... Y se juega mejor
Claro que no solo en los gráficos se ha centrado el equipo: la jugabilidad ha sido igual de beneficiada, o puede que incluso más. Para empezar, incluso jugando en una PS4 estándar, el rendimiento es mucho más estable que en su contrapartida de PS3, lo que ya de por sí mejora la experiencia de juego. Algunas ralentizaciones pueden aparecer de forma puntual, pero en lo que hemos probado hasta ahora —en torno a la primera mitad—, han sido de forma tan localizada y poco intrusiva que ya casi hemos dedicado más tiempo a escribir esta frase que a pensar en ellas.
En lo que sí vale la pena detenerse es en el mejorado sistema de combate. El NieR original fue creado por la extinta Cavia y, si bien disponía de unas peleas competentes, con una treintena de armas para elegir (espadas a una mano, espadas a dos manos y lanzas) y un variado sistema de magias, el diseñado por Platinum Games para Automata jugaba en otra liga. Una parte se debió a la extrema destreza del estudio con la acción; otra, a un giro más acentuado hacia el Hack and Slash con toques RPG. NieR, si bien parcialmente encuadrado en ese género, se caracteriza por un enfoque más aventurero (influenciado por Zelda), y con él, también un combate más sencillo, algo que repercute tanto en el ritmo como en el diseño de encuentros.
Transformar Replicant en “Automata 2”, por tanto, no sería factible sin rediseñar rutinas enemigas, añadir mecánicas y, poco a poco, alejarse de lo que era NieR en primer lugar. Así que el equipo ha optado por una especie de término medio: los fundamentos siguen siendo los mismos, pero el combate fluye mejor gracias a un ligero incremento en la velocidad —nuestra y de los enemigos—, la implementación de centrado para mantener a los objetivos deseados en pantalla, la introducción de nuevos combos en el botón que antes ejecutaba el ataque especial (Triángulo o Y según consola) y la posibilidad de golpear y usar magias a la vez. Ajustes que quizá parezcan pequeños por separado, pero marcan mucho las diferencias en conjunto.
Replicant vs. Gestalt
Quizá a algunos os sorprenda que dejemos la faceta narrativa para el final, dado que es —junto a su prodigiosa banda sonora, también re-grabada con nuevos arreglos para la ocasión— uno de los aspectos más importantes a la hora de conseguir para NieR ese estatus de culto del que ya gozó años antes de que Automata acercase la saga a un público más amplio. El análisis será un lugar más adecuado para profundizar en las razones, que no son pocas; pero hoy, siguiendo con el enfoque más comparativo del avance, debemos reparar al menos en el cambio de protagonista.
Una de las muchas curiosidades atípicas del primer NieR es que está protagonizado por diferentes personajes según la versión. Originalmente, Yoko Toro lo planteó como la historia de un muchacho huérfano —sin nombre canónico, pero comúnmente apodado Nier— que debe velar por su hermana pequeña, Yonah, cuando esta contrae una misteriosa enfermedad aparentemente incurable. Sin embargo, durante el desarrollo también surgió la idea de aumentar la edad y convertirlo en su padre para afianzar esa relación paterno-filial y apelar al mercado occidental con un personaje más maduro. Así nació la distinción entre NieR Replicant (hermano) y NieR Gestalt (padre), que en Japón fueron las versiones de PS3 y 360 respectivamente, pero en Occidente se unificó priorizando la versión del padre. Hasta ahora, claro.
De nuevo, para posible descontento de puristas, esta vez no nos queda otra que jugar con el hermano, aunque la historia a grandes rasgos es la misma para ambos —cambian las pequeñas interacciones con otros personajes—. Preferir uno u otro es una cuestión de eso, gustos, y si bien es cierto que la relación entre padre e hija ofrecía una perspectiva algo más original para el género —sobre todo entonces, antes de la llegada de juegos como The Last of Us o God of War—, el hermano ofrece una evolución más manifiesta y tiene dinámicas algo más naturales con otros secundarios como Kainé.
Hablando de personajes, tampoco podemos cerrar sin dejar de comentar que más allá de todos los cambios gráficos y jugables, esta edición también viene de la mano con una pequeña revisión del guion y nuevo doblaje. Antaño, muchos de los diálogos corrientes fuera de las secuencias se limitaban a texto, así que han aprovechado el regreso del reparto para grabar tanto partes viejas con alteraciones —incluyendo más palabrotas para Kainé— como muchas líneas nuevas que ambientan mejor el grueso del juego. Todo ello, además, ahora subtitulado en español y con opción de doblaje dual por si alguien prefiere las voces japonesas a las inglesas.
Podríamos seguir, pero para eso vendrá el análisis dentro unas semanas y, total, a estas alturas seguramente ya quede claro por qué Replicant ver.1.22(etcétera) se perfila como la versión definitiva del juego —por bastante, además— y también como un nuevo aspirante a imprescindible dentro del repertorio actual de Square Enix. NieR está de vuelta y ha hecho los deberes para conseguir más atención que en su primer intento. Algo que, incluso a falta de ver cómo remata la faena, debería ser muy buena noticia para todos los fans de la obra del peculiar Yoko Taro.
NieR Replicant ver.1.22474487139...
- RPG
- Acción
NieR Replicant ver.1.22474487139... es una nueva versión del título de acción RPG original de PlayStation 3 para el mercado japonés, esta vez, para todo el mundo en PC, PlayStation 4 y Xbox One a cargo de Toylogic y Square Enix. La precuela mejorada de NieR:Automata. Un bondadoso joven parte en compañía de Grimoire Weiss, un extraño libro parlante, en busca de los Versos sellados para salvar a su hermana Yonah, enferma de necrosis rúnica.