Sombras de Mordor, The Medium y el peligroso precedente de patentar mecánicas de juego

El sistema Némesis, introducido por primera vez en La Tierra Media: Sombras de Mordor y más adelante en su secuela, Sombras de Guerra, fue una innovación interesante. Al caer derrotado por un enemigo, este asciende en la jerarquía y se fortalece. De este modo, cuando se encuentra de nuevo con nuestro protagonista, recuerda su anterior enfrentamiento (y se burla de él). Assassin's Creed Odyssey se inspiró claramente en él para construir su sistema de mercenarios, ya desaparecido en Valhalla, la entrega más reciente. La noticia que ha saltado en las últimas semanas es que Warner Bros ha conseguido patentar el sistema en Estados Unidos, lo que conduce a una pregunta: ¿Qué pasará si otro juego utiliza algo similar?

Bloober Team, el equipo responsable de The Medium, también ha ejecutado una maniobra parecida. Marianne camina por los corredores de un antiguo hotel, cuando de repente su ser se desdobla en dos: la persona de carne y hueso y su yo espiritual. A partir de ese momento, el jugador tiene la oportunidad de manejar a ambas versiones del personaje en dos universos a la vez. Ahora, esta característica está protegida por una patente.

Josh Sawyer, un desarrollador veterano de Obsidian Entertainment (Pillars of Eternity), ha sido uno de los primeros en expresar su oposición. “Warner Bros ha patentado el sistema Némesis. Menudo montón de mierda”. El creativo ha defendido que si alguien es capaz de mejorar un sistema anterior merece un aplauso, saborear las mieles del triunfo. “Si alguna vez intento proteger legalmente una mecánica espero que sea ejecutado por el método del escafismo”, ha escrito en Twitter. Lo cierto es que el camino tomado por Bloober Team y Warner Bros abre un escenario de incertidumbre y de interrogantes.

Los videojuegos, como toda obra artística, no se desarrollan como entidades autónomas, sino en un contexto en el que se tienen en cuenta los títulos anteriores, las tendencias contemporáneas y los códigos culturales de la sociedad que los consume. Las buenas ideas son una oportunidad para que otros estudios las implementen en sus títulos, experimenten con los sistemas y les confieran sus propias particularidades, es decir, su sello característico.

Me pongo en un escenario hipótetico en el que Warner Bros decide denuncia a otra desarrolladora al considerar que se ha violado su patente. Suena tan ridículo que de hacerse realidad parecería una noticia de El Mundo Today. Y es que puede que La Tierra Media: Sombras de Mordor implementara una mecánica fresca, lo que no quita que buena parte de su diseño sea similar al de otros tantos juegos de mundo abierto. De hecho, recuerdo nítidamente que cuando se anunció no fueron pocas las voces que sacaron a relucir su parecido con Assassin's Creed. La hemeroteca, que nunca engaña, nos recuerda que allá por 2015, Charles Randall, diseñador de combates de la segunda entrega del juego de Ubisoft, se mostró indignado porque La Tierra Media le parecía un plagio.

Es cierto que hay una fina línea entre la inspiración y la copia, pero los videojuegos no habrían avanzado si los distintos estudios no hubieran tomado ideas del de al lado. Por esa regla de tres, todos los shooters en primera persona tendrían que pagar a id Software por cada juego de este estilo que sale. En la misma línea, The Medium emplea elementos jugables que se han visto una y mil veces en las aventuras gráficas y narrativas, donde prima la exploración de objetos diseminados por el escenario.

La mayoría de propuestas jugables que se ven en los videojuegos actuales se han gestado en otros proyectos y han ido evolucionando a lo largo de los años. De la mano de la tecnología, conceptos que previamente resultaban algo rugosos, ortopédicos, han logrado pulirse e implementarse en obras de géneros muy distintos. Patentar una mecánica jugable es contraproducente para la evolución futura de los videojuegos como medio.

Perseguir las copias que se limitan a fusilar sin rubor es correcto y necesario, pero valerse de una patente para tratar de sacar rédito económico ante un sistema jugable me resulta mucho más complicado de entender. No digo que Warner Bros o Bloober Team vayan a utilizar esta estrategia, aunque intuyo que si lo han hecho será por algo. Lo complicado es conocer el alcance de las implicaciones que algo así puede tener. No deseo que esto se convierta en un campo de batalla judicial. Todos perdemos.