Por qué Rare continúa creando nuevas IP en vez de seguir las ya existentes

Rare es una de las compañías europeas más respetadas de la industria del videojuego por el currículo de títulos que tienen a sus espaldas desde la época con Nintendo hasta su actual etapa dentro de Xbox Game Studios. El equipo inglés cuenta con una gran cantidad de propiedades intelectuales a sus espaldas, muchas sin continuidad, pero esa condición se rige por una filosofía clara: les encanta crear cosas nuevas.

De mares piratas a lo idílico y campestre de Everwild

Everwild es su último videojuego, una obra que apunta a 2020 en Xbox One, PC y Xbox Game Pass donde pretenden contar algo completamente distinto a sus últimos trabajos, como el multijugador Sea of Thieves. En un encuentro con Eurogamer, el director del estudio, Craig Duncan, ha explicado que prefieren apostar por nuevas licencias que verse obligados a lanzar secuelas de sus obras ya existentes.

Cuando se le pregunta por qué tantas nuevas IP sin nuevos episodios, la respuesta de Duncan es clara: “Si esa fuese nuestra lógica, a estas alturas hubiésemos estado trabajando en Jetpac [1983] durante los últimos treinta y cinco años” porque “lo mejor de hacer videojuegos es reunir a un grupo de personas apasionadas que realmente hacen lo que aman y creen en ello. Esa es nuestra meta a la hora de hacer las cosas”.

Continúa con el ejemplo de su último título, que ha logrado remontar el vuelo y cuenta ahora con una ingente comunidad de fieles: “Es por eso que Sea of Thieves es el juego que es. Es por eso que Everwild será el juego que será; porque tenemos un equipo de personas que está verdaderamente apasionado con aquello que están creando. Mi trabajo como líder del estudio es crear un ambiente de trabajo donde ellos puedan acudir y hacerlo posible, que puedan dar lo mejor de sí; y entonces poder crear algo increíble”.

Asume que “no es cuestión de coger el juego que yo quería hacer o que la gente quiere crear; se trata que el equipo al completo pueda hacer aquello en lo que arden en deseos y de corazón hacer la experiencia más asombrosa”. Se extrae de sus palabras, por tanto, que con la secuela se pierde la magia de hacer algo nuevo de cero al continuar un deseo ya colmado.

Booty no niega, en ningún caso, que vayan a trabajar en un futuro en una eventual secuela de alguna de sus IP anteriormente creadas. Everwild, mientras tanto, se encuentra en preproducción con un equipo de unas cincuenta personas.

Fuente | Eurogamer