La Marina estadounidense también tiene su propia arma láser
Te contamos cómo es el arma más puntera de los buques de guerra norteamericanos.
Si hablamos de un láser todo el mundo piensa en un haz de luz capaz de atravesar un objeto o fundir metal. Algo de verdad hay en todo esto, pero por desgracia nada tiene que ver con lo que George Lucas nos hizo imaginar viendo la Guerra de las Galaxias. Lo cierto es que no estaba mal encaminado y ahora vemos cómo los ejércitos montan armas láser hasta en sus barcos.
Así es el láser de la US Navy
Las fuerzas de defensa de los países en el mundo son los primeros en utilizar la tecnología que usamos hoy en día. Tal vez no toda, pero la que se puede aplicar a la vida de civil si. En este caso nos encontramos con una aplicación que difícil tiene su acople a lo que es la vida del ciudadano medio, pero lo cierto es que hay algunas que sí que tienes en tus manos, sin ir más lejos algún smartphone que haya pasado el famoso test Mil-STD 810 para garantizar la resistencia de un aparato.
Pero hoy nos toca hablar de la dotación asignada a los buques de guerra más modernos de la marina estadounidense. Estos vendrán equipados con el nuevo Laser Weapon System (o LaWS) que tendrán diferentes usos. Lo primero es hablar de su estructura, que es en esencia un cañón de luz que emite varias ondas lumínicas capaz de desactivar objetivos electrónicos en cuestión de segundos. Concretamente los envía a la velocidad de la luz, por lo que el desarme es casi inmediato. Además no es nada barato, ya que desarrollarlo ha costado nada menos que 40 millones de dólares.
El cañón se alimenta de una pila de energía colocada en el barco lo suficiente potente para usar un rayo de nada menos que de 300 kilowatios. Con esta potencia, como puedes ver en el video, una pequeña barcaza que se acerque con intención de atacar el navío puede ser desarmada con un disparo que no provocará daño mayor que a los circuitos de la pequeña barca. Lo mismo les ocurrirá a los drones, los cuales recibirán un impacto y caerán directos al mar.
Todo esto se dirige desde una cabina de control, desde la que un operario cualificado ve las señales infrarrojas, coloca el cañón y lo dispara contra el objetivo que queda desarmado o inhabilitado. Este sistema del LaWS no es el único aparato láser en el ejército estadounidense. Recordemos que el equipamiento de este ejército también pasa por el proyecto de Raytheon.