Crean un barco que fabrica combustible con agua de mar
El Energy Observer ha estado navegando durante seis años con energía solar, eólica y un tanque de hidrógeno.
La gran parte de los vehículos que circulan por los mares, el aire y las carreteras de todo el mundo disponen de motores de combustión. Estos no son los que más respetan el medioambiente, pero sirven para que las personas y mercancías de todo el mundo lleguen a su destino. En los últimos cinco años se ha investigado en nuevas formas de evitar la contaminación y al menos en el campo naval se ha conseguido un gran avance con Energy Observer, un barco que fabrica combustible con agua de mar.
Así obtiene este velero su energía
Muchos de los barcos que surcan el mar utilizar un motor diésel para mover toda su masa, especialmente los más grandes. Otros más pequeños utilizan motores acordes a su tamaño, pero también se valen de otros métodos como pueden ser una vela. Pero el que tenemos hoy delante es capaz de moverse sin repostar combustible fósil y se llama Energy Observer.
Estamos ante un velero que genera energía por sí mismo. Aciertas si piensas que tiene paneles solares y dispositivos de energía eólica, pero esconde otros trucos que te vamos a contar a continuación. De los que hemos hablado ahora dispone de 168 metros cuadrados de paneles solares distribuidos por el casco, los cuales no solo recogen la luz que llega del sol, también la que refleja el agua.
Por otro lado, unas turbinas recogen la fuerza del viento para cargar las baterías del velero, y junto con los anteriores se cargan las baterías de nada menos que de 126 kWh. Ambas energías renovables son suficientes para mover la hélice del barco y dar soporte a las necesidades de los tripulantes. Pero es que en el título te hemos dicho que un barco que fabrica combustible con agua de mar y es que de eso te vamos a hablar ahora.
Resulta que una vez que las baterías llegan al 60% de su capacidad por consumir se activa la fuente secundaria de energía. Esta se consigue gracias a un tanque de hidrógeno que mediante un proceso de electrólisis se consigue separar las moléculas de hidrógeno del agua para convertirlas en combustible. Para este procedimiento se necesita una desalinizadora, un electrificador y un compresor con los que conseguir el efecto desea y un objetivo: que el velero no deje de moverse ni dar energía.
El director del proyecto Louis Noël Vivies ha confirmado a Engadget que el secreto de que haya estado seis años en funcionamiento reside en una mezcla de las energías renovables. Puede que esta tecnología no sea tan potente para barcos grandes, pero podría suponer un antes y un después para el consumo en ciudades.