Mad Box, la consola de Slighty Mad Studios, tendrá que cambiar de nombre
Se llame como se llame, lo que es seguro es que Mad Box no será como la terminaremos conociendo por un conflicto legal con el que ahora lidian.
Slighty Mad Studios, responsables de proyectos como Project CARS, se encuentran inmersos en un problema legal con el que no contaban: su consola Mad Max, presentada a comienzos de 2019, no podrá llamarse así.
En su búsqueda por inmiscuirse en la maratón generacional en que se encuentran Sony, Nintendo y Microsoft, el estudio británico fundado en 2008 se ve ahora obligado a eliminar el nombre Mad Box del registro de este hardware por un motivo muy sencillo, y es que una empresa francesa de entretenimiento digital ya adquirió los derechos de esa nomenclatura en un registro de patentes en el pasado bajo el nombre de “Madbox”, sin espacio, para bautizar a su empresa.
Mad Box y Madbox, posibles confusiones
Tal como adelanta PCGamesInsider, aunque Slighty Mad procedió siguiendo todos los pasos legales para que en la European IP (EUIPO) apareciese el nombre de Mad Box en la máquina, pero esta firma francesa, Madbox, ha recurrido legítimamente alegando que puede haber una “confusión por parte del público”.
Los parecidos son innegables y, según adelanta la fuente, el estudio francés tiene las de ganar, por lo que lo más sencillo para Slightly Mad es que no intenten mantener un pulso con ellos y apliquen con otra nomenclatura. Ninguna de las dos empresas ha contestado a la fuente para comentar este hecho.
Por el momento no sabemos mucho acerca de la consola de los británicos, solo promesas. Hemos visto prototipos en imágenes y que será “la consola más potente del mundo”. Se podrá poner en vertical y en horizontal, estará hecha de fibra de carbono y metal y tendrá varias líneas de luz que recorrerán sus formas, que además mostrarán un color que irá cambiando si así lo queremos. Su objetivo es ofrecer resolución 4K en todos los juegos con una tasa de 60 FPS en sus videojuegos o integrar realidad virtual. Esperan que esté disponible dentro de tres años.