Blackwidow Elite: Análisis. ¿El teclado más completo de Razer?

Razer comienza sus andaduras en el mundo de los teclados con el Tarantula allá por 2006, pero fue el Blackwidow el que lanzó a la compañía a las altas esferas de los distribuidores de estos periféricos, si bien no en cuanto a calidad desde luego en lo que respecta a ventas. Desde entonces la compañía ha ido puliendo varios aspectos de sus teclados, mejorando e introduciendo nuevas versiones de sus actuadores mecánicos e incorporando nuevas características. A través de innovadoras tecnologías como la resitencia al agua y polvo del Blackwidow Ultimate o los actuadores optomecánicos del Huntsman Elite la compañía singapurense ha sabido mantenerse al frente de la industria mientras poco a poco mejoraba la calidad de sus teclados para hacer frente a la competencia.

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Con el Blackwidow Elite Razer pretende ofrecer una opción para aquellos que quieran un teclado competente con la mayor cantidad de funciones y características posibles. Se podría decir que lo consiguen, pero una regresión en el diseño hace que este teclado no pueda acercarse a la perfección. Aun así, su lanzamiento junto al Blackwidow Lite se convierte en uno más de la excelente gama de teclados modernos de Razer que poco a poco va ofreciendo algo para cada tipo de usuario. Te contamos todo sobre la versión de elite del teclado para jugadores más famoso de la historia.

Pensado para el jugador

Puesto que el Elite está posicionado como un teclado para jugadores comencemos discutiendo su comportamiento en diferentes juegos y géneros, más específicamente cómo se comportan sus actuadores. Hasta ahora habíamos probado casi todos los actuadores mecánicos de Razer y siempre habíamos respetado su precisión y velocidad pero faltaba algo: ese satisfactorio click que caracteriza a los teclados mecánicos. En este caso nos topamos con los actuadores verdes y podemos confirmar que efectivamente sacia nuestra necesidad auditiva de que cada vez que tecleamos el efecto sea manifiestamente sonoro. Aquellos que compartan habitación o quizás vayan a usar el teclado en un entorno laboral quizás prefieran una de las versiones más silenciosas (al final de este apartado exploraremos las diferencias entre versiones), pero los que disfruten con un teclado capaz de despertar al vecino deberían optar por estos actuadores verdes.

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Puesto que se trata de un teclado que debería poder satisfacer hasta a jugadores profesionales, cabe esperar una precisión y velocidad adecuada de sus teclas y tiempos de respuesta. Afortunadamente, podemos confirmar que independientemente de las pruebas realizadas y las complejas piruetas jugables que hemos intentado realizar con este teclado el periferico ha sido capaz de superarlas con éxito. En Apex Legends, por ejemplo, el teclado es un componente bastante más importante de lo que pudiera parecer. En consola los sticks analógicos son un excelente método de controlar el movimiento pues su diseño permite un gran control sobre la aceleración y deceleración del movimiento. Aunque en ordenador el ratón nos ofrece una precisión inalcanzable en consola, los teclados tradicionalmente han sido incapaces de competir con el analógico en lo que respecta a mover nuestro personaje.

Con un teclado como el Blackwidow Elite la increíble velocidad de respuesta y el hecho de que es difícil dudar de haber presionado una tecla cuando la acompaña un notorio sonido hacen que sea fácil presionar varias teclas cientos de veces por minuto. Esto nos permite un mayor control sobre nuestro personaje, algo indispensable en el battle royale de Respawn donde, ante todo, prima el movimiento eficiente y preciso. Resulta sencillo apuntar a nuestros enemigos y rápidamente volver a cubrirnos, maniobras complejas como el rebote en paredes son relativamente posibles de perfeccionar y en general el teclado se comporta muy bien con este título. Asimismo, acciones como presionar infinitamente un botón para coger una tirolina nunca dan la sensación de fallar porque el teclado no haya captado uno de nuestros repetidos intentos de presionar “E”, sino porque no estábamos bien posicionados.

Otros juegos como Rainbow Six:Siege también demuestran bien la buena usabilidad de este teclado. En este título es especialmente importante (por lo menos de momento) la mecánica por la cual nos podemos inclinar hacia uno u otro lado. Los buenos jugadores abusan de esta mecánica, indispensable en un juego en el que todos y cada uno de los personajes mueren de un solo tiro a la cabeza de todas y cada una de las armas. El poder mostrar solo tu cabeza, solo durante un segundo y conseguir en el proceso buenos ángulos con los que cubrir todas las direcciones de entrada posibles es una habilidad que provée una ventaja practicamente insondable y se convierte por tanto en una habilidad necesaria para prosperar en el título. Podemos confirmar que el “lean spam”, como llaman los anglosajones a la práctica de abusar de esta mecánica, se ejecuta a la maravilla con este teclado, así como su variante el “crouch spam” que consiste en abusar del agachado.

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En Fortnite encontramos que la construcción es sencilla y que fallamos menos al colocar nuestras piezas que con otros teclados que hemos tenido en el pasado. Los factores que ayudan a abusar de ciertas mecánicas en Rainbow o a movernos mejor en Apex también facilitan estos dos factores en Fortnite y ambos son una ayuda indispensable en este título que, aunque pueda parecer amigable en un primer momento, es extremadamente difícil si queremos ser competentes de verdad. Quizás lo que más hayamos notado con este teclado sea una mejora a la hora de cambiar entre armas rápidamente, algo que nos costaba antes y que es absolutamente imprescindible de amaestrar para destacar en este juego. Podemos decir con cierta carencia de humildad que hemos conseguido varias victorias en solitario contra dúos con este teclado.

Un juego excepcional para probar la valía de cualquier teclado mecánico es Dota 2 y más concretamente su héroe Invoker. Este personaje combina sus tres habilidades básicas en tiempo real para, como su nombre indica, invocar hasta nueve hechizos diferentes, a veces en combos o secuencias impresionantes. Esto puede implicar treinta o más teclas presionadas en cuestión de cinco segundos, o más de seis pulsaciones por segundo. De nuevo, no tenemos ningún problema en ejecutar estas combinaciones avanzadas con estos actuadores verdes y no se nos ocurre prueba mayor a la que someter al teclado. Puede haber teclados mejores o actuadores más precisos, es imposible negarlo sin probar todo lo que ofrece el mercado, pero podemos asegurar que el Blackwidow Elite es perfectamente capaz de llevarte a las más altas cumbres de la competición en cualquier juego.

Cabe mencionar que el teclado también se ofrece con variantes de los actuadores naranjas y amarillas y aquí nos ponemos técnicos para discutir las diferencias entre ellos. Como ya hemos dicho las verdes son las más ruidosas, pero también las más táctiles. Su fuerza de actuación es de unos 50 gramos y la distancia y actuación 4 y 2 milímetros respectivamente. Las naranjas requieren cinco gramos menos de actuacion y tienen una distancia de viaje similar pero la diferencia entre los puntos de actuación y reseteo es de 0.05 milímetros frente a los 0.4 de los actuadores verdes. Los amarillos son similares a los naranjas pero aún más silenciosos, con menos distancia de viaje y actuación (3.5 y 1.2 milímetros) y la importante característica de carecer de diferencia entre puntos de actuación y reseteo. En la página de Razer podéis acceder a los datos técnicos así como escuchar como suenan pero os lo resumimos así: los verdes son para quien necesita saber que ha presionado una tecla, los naranjas para quien quiere un teclado como los de toda la vida y los amarillos para quien prefiere escuchar a un gato chillar al sonido de una tecla. Finalmente, se nos garantizan más de 80 millones de pulsaciones para cada tecla con lo cual el teclado debería durar una vida para todos menos los más exigentes.

Los mil y un macros

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Aficionados a los macros, estáis de enhorabuena. Gracias a la funcionalidad Hypershift, incluida en el programa Razer Synapse que acompaña al teclado, podemos asignar a cada tecla su propia función secundaria lo que nos permitiría en teoría asignar un macro a cada tecla de manera individual. En la práctica raro será usar tamaña cantidad de macros a no ser que seamos profesionales de la edición de video, fotografía u otros necesitados de cientos de atajos para nuestro día a día. Cabe decir que tanto estos macros como el resto de la configuración se guardará tanto en la memoria del propio teclado como en la nube de Razer a través de Synapse.

Aquellos que gusten de personalizar la iluminación de su teclado también disfrutarán de esta compra. Con sus más de dieciséis millones de colores posibles, el Blackwidow Elite incluye con Synapse las herramientas Chroma con las que podremos crear nuestros propios colores, patrones de iluminación e incluso animar dichos patrones. Infinitas opciones para quienes sean unos obsesos del RGB, pero que menos podíamos esperar de la compañía pionera en la materia. Razer son a día de hoy amos y señores de esta tecnología y poco podamos decir que no sepáis al respecto gracias a su marketing.

Pero no todo iba a ser bueno o habríamos estado hablando del teclado perfecto desde el principio. No, cuando vamos a los aspectos externos del teclado encontramos un par de defectos notables que creemos merece la pena mencionar. En primer lugar, el reposamuñecas dista mucho de la quasi-perfección que alcanzaron los reposamuñecas de teclados pasados de la compañía. Algo ha ocurrido durante el diseño de este teclado que hace que la unión entre él y el reposamuñecas no sea perfecta sino que resbale continuamente. Jamás se esta quieto, posiblemente por la "elegante" curva de la parte inferior del teclado, pero esto es algo que la compañía ya había hecho bien y ahora sin embargo se convierte en la mayor lacra de este producto.

Por otra parte una de las nuevas características de este teclado nos deja también algo fríos. Tras el Razer Huntsman Elite, se han incorporado controles multimedia en este teclado entre los que se incluye una rueda de volumen. Dicha rueda es, por desgracia, poco robusta y pequeña lo que hace que aquellos que jugamos con la sensibilidad del ratón baja tengamos demasiado fácil activarla accidentalmente. Esto es especialmente desagradable en Windows, donde se nos puede ralentizar el ordenador o aparecer el control de volumen durante una partida intensa, algo particularmente molesto. Agradeceríamos que en el futuro esta rueda fuese más grande para permitir mayor modularidad en su control y ser más difícil de activar accidentalmente.

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El cable, sin embargo, es plenamente satisfactorio. Robusto y reforzado, apenas muestra signos de uso tras un par de meses y dudamos lo haga en varios años. Su tamaño y peso hacen que rara o ninguna vez haya sido molesto durante nuestras partidas y la posibilidad de hilarlo a través de la parte inferior del teclado puede hacer aun más dificil que esto ocurra.  Cuenta con tres enchufes, uno de 3.5 mm para audio y dos USB aunque solo uno de los USB será necesario para usar el teclado. Los otros dos se emplean para alimentar sendas entradas USB y de audio en el lateral izquierdo del teclado, utiles por ejemplo para enchufar nuestros cascos y mando de consola a través del teclado.

En definitiva, el Blackwidow Elite se trata de un teclado perfectamente competente pero que dista mucho de su designación de elite. Es un teclado de gama media alta que, a un precio de casi doscientos euros, puede ser dificil de recomendar por encima de la competencia. Por poco más hay teclados mejores, más completos y mejor diseñados. Si nuestro presupuesto no se puede permitir la escala más alta de teclado mecánico, sin embargo, este es un producto que podemos recomendar sin remordimiento alguno de conciencia. Su duradero diseño y la increible sensación que dan sus teclas hacen que, a pesar de esos pequeños errores que hemos mencionados, la experiencia de usar este teclado haya sido positiva.