Far Cry: New Dawn muestra el destino de la secta de Eden's Gate

Far Cry: New Dawn es una nueva entrega, pero también una secuela argumental de Far Cry 5. El título, que ya es Gold, se ambienta en Hope, el ficticio condado de los Estados Unidos donde empezó todo. Una secta se hizo con el gobierno de la región y sembró el caos, hasta el punto de destruir la zona tal y como era conocida hasta entonces. Un nuevo amanecer, el renacer de la humanidad. Los santitos, la antigua secta y su lider —Joseph Seed— fueron los artífices del desastre. Pero ¿qué ha sido de ellos?

Olivia Alexander, una de las guionistas de Far Cry: New Dawn, ha manifestado en una entrevista con US Gamer que la secta ya no es “una fuerza antagonista”. Esto es obvio, al menos teniendo en cuenta que las nuevas villanas del juego son nada más y nada menos que dos hermanas de fiero carácter y sanguinaria personalidad. Según Alexander, “el culto se llama ahora Nuevo Edén, y rechaza todo lo referido al mundo anterior”. Eso significa que no quieren saber nada de “las armas mecanizadas” ni de “la tecnología”, incluso se arrepientes de su conducta en Far Cry 5. “Son más bien neutrales. Están cerrados en sí mismos, trabajan la tierra y poseen su propia comunidad”.

Amanece, que no es poco

Far Cry: New Dawn transcurre 17 años después de la crisis que sumió Hope en desgracia. Sin embargo, tras años luchando contra la radiación, el mundo ha florecido en color rosa. Junto a las ruinas de antiguas iglesias y granjas, los antiguos habitantes y su descendencia intentan sobrevivir a la catástrofe. Sin embargo, las nuevas villanos no lo van a poner nada fácil. La novedad, en ese sentido, es que por primera vez en la franquicia nos vamos a enfrentar contra dos antagonistas principales.

El juego, desarrollado para PC, Xbox One y PS4, saldrá a la venta el 15 de febrero, justo el mismo día que Metro Exodus. A pesar de que ambos juegos comparten un mundo erosionado por la radiación, la apuesta de Ubisoft es mucho más alocada y disparatada.