Borderlands 2: La Capitana Scarlett y su Botín Pirata

Quien ha decidido hacerse con Borderlands 2 sigue jugándolo. El nuevo imprescindible de 2K Games ha sido una delicia en cuanto a jugabilidad profunda y duración, mejor con otros tres jugadores. Es una constante invitación al coleccionismo, un "Diablo con pistolas" que dicen muchos, un título enorme que además contará con 4 DLCs a 9,99 euros cada uno para darle aún más tamaño, casi el doble en total. El primero de ellos llega hoy a PlayStation 3, Xbox 360 y PC, pronto. La Capitana Scarlett y su botín pirata es una expansión rica y considerable, que va más allá de lo que cabe pedir a este tipo de contenidos que, a fin de cuentas, lo que hacen es agrandar de forma opcional a la par que encarecen el precio del juego completo. Gearbox Software nos ofrece más de lo mismo, pero lo hace irresistible para los jugadores asiduos, seguramente casi todos.

Un oasis seco

Oasis es la nueva zona que abre este DLC, un territorio vasto y algo más extenso que el resto de áreas a las que podemos viajar directamente o con las máquinas de teletransporte que distribuye el juego. Situado al noreste del mapa de Pandora, esta castigada tierra está poblada por más excéntricos personajes que nos ayudarán o pondrán por delante desafíos, capitaneados todos ellos por una temida pirata, caradura y pícara como ella sola, que lleva años anclada en la zona con su velero buscando el Tesoro de las Arenas. Pronto se pondrá en contacto con nuestro personaje, también interesado en el botín, en una curiosa relación amistad-odio que nos invitará a ayudarla en su búsqueda, empezando por las 4 piezas de una brújula que señala la ubicación del legendario cofre. Buscar, luchar y buscar, una dinámica muy convencional que no se aleja de la tónica general de Borderlands, totalmente mantenida y sin cambio alguno.

Ampliar

El ambiente de esta zona es radicalmente distinto a todas las demás del juego. Nos encontramos en un desierto gigantesco y lleno de acantilados, botes hundidos en la arena, anclas y desolación que anteriormente tuvo en su centro una fructífera capital pesquera poblada gracias al manantial que había en su subsuelo. Ahora ese manatial sobrevivie y visitaremos zonas muy frondosas con cascadas y vegetación, pero no llega hasta la superficie y lo que era una preciosa ciudad-oasis se ha terminado secando, dejando solo a un único habitante completamente loco y en busca de compañía, por lo que no tardará en ayudarnos para que nos quedemos un poco más cerca de su tienda. Los puntos de conexión entre zonas con tiempos de carga siguen diferenciando cada terreno de Oasis.

Nuevos vehículos, como los squifers levitadores con forma de embarcación y una inesperada nave, nos sirven para movernos por este mar de arena y rocas, plagado de todo tipo de nuevas criaturas animales, cibernéticas y flora, como los gusanos gigantes que salen a nuestro paso, piratas cibernéticos que intentan abordarnos al recorrer las áreas más abiertas, insectos, soldados piratas... Todo ello introduce también nuevo arsenal, como desintegradores, sables especiales, una nueva modalidad de rifle francotirador, y otras sorpresas que el jugador puede investigar en una aventura que acaba yéndose a las 8 o 10 horas de juego para acabarla por primera vez, llevándonos a través de cuarteles enemigos, las ruinas de la ciudad, la parte viva del manantial o misteriosas cuevas y templos repletos de reliquias, lo que también introduce nuevos coleccionables y formas de investigar en compañía.

Ampliar

La dificultad se intensifica en unos tiroteos exigentes y unos jefes finales que van a demostrar la hostilidad y peligros de la zona. No es recomendable lanzarse pronto a este nuevo páramo de Pandora, sin embargo, es cierto que nuestro nivel de experiencia marcará cómo sera la IA, daños y resistencia de todas las criaturas, bastante inteligentes en los niveles más altos y muy ofensivas tanto con armas de fuego como cuerpo a cuerpo. La Capitana Scarlett, egocéntrica y chula pero de carisma totalmente interesante como NPC, nos avisa pronto de estos peligros, aunque nada hace esperarse al jugador cómo acabará esta odisea pirata donde los mares han sido sustituidos por arena y pobreza natural.

Las misiones secundarias de esta ampliación sirven también para ganar más puntos de habilidad y, espeicialmente, subir el rango de Cabronazo. Muchos de los trabajos opcionales nos llevarán hasta piezas únicas, buenos cofres de munición o algún hallazgo que amplíe la historia central tanto del DLC como de Borderlands 2 en general. No se amplía el nivel de experiencia, que sigue en un máximo de 50, pero jugado con ciertas clases es todo un desenfreno, por ejemplo con la nueva Mechromancer, que en este área funciona especialmente bien para que el robot aliado de la cazadora se desquite con todo lo que salga a nuestro encuentro, es quizá la clase más sencilla de controlar, totalmente overpower gracias al aliado mecánico que invocar.

Ampliar

DLC un mes después

Es cierto que 2K Games no ha esperado demasiado para lanzar una expansión que probablemente ya estaba hecha antes del estreno del título, pero quien esté completamente pegado al juego, como decíamos, no va a poder resistirse a este episodio, que al menos gira en cuanto a tipos de enemigos, ambientación y objetos por recoger. Oasis es una zona interesante y variada en localizaciones y escenarios. Los jugadores con nivel más alto disfrutarán de un nuevo reto de ambiente pirata enrrarecido como solo Gearbox sabe poner en pie. Por poco menos de 10 euros es un contenido grande, aunque para nada innovador o que haga evolucionar la experiencia del juego central.