Egipto Kids
Egipto Kids - Intentando Salvar a Nay
La solución a una revisión de Egipto II, para los más pequeños, con cursillos interactivos. Una buena forma de aprender jugando.
INTENTANDO SALVAR A NAY
Cogemos la comida feliz de detrás de la silla del estudio y usamos el despertador para viajar a Egipto. Con el mapa vamos al Patio de Silos. Vamos hasta el tercer silo y Nay ya no está. Vamos al otro lado del silo y de la escalera cogemos un pectoral roto. Con el mapa regresamos al Distrito donde hablamos con Hipo sobre Sobekhotep y le enseñamos el pectoral roto. Vamos a casa de Sobekhotep pero la puerta interior está cerrada. Regresamos junto a Hipo y jugamos a su juego. Una vez vencido Hipo nos da un pase (llave). Volvemos a casa de Sobekhotep, entramos en ella y usamos el pase en la puerta para abrirla. Ya dentro de la casa pasamos por el corredor, examinamos el fresco de la pared y oímos a Nay que nos grita.
Usamos el mapa y vamos a la Casa de la Vida. Entramos por la puerta frontal y vamos todo al fondo por el lado derecho para encontrar a Dos Caras y pasar a su mundo. Le hablamos de todo y jugamos a su juego que consiste en hacer bajorrelieves de jeroglíficos. Acabado el juego volvemos a casa de Sobekhotep. Dentro buscamos cuatro fragmentos de fresco. Tres de ellos están en la misma habitación de entrada y el cuarto en la escalera que hay entrando en el pasillo y girando a la izquierda. Entramos en el pasillo y usamos los cuatro fragmentos en el fresco para reconstruirlo. Así se abre la puerta de nuestra espalda, encontramos a Nay encadenada y le hablamos.
Usando el mapa regresamos a la Casa de la Vida. Entramos y hablamos con Paser el escriba. Vamos al final del pasillo de la izquierda y encontramos el Taller del Escriba. Jugamos al juego que consiste en traducir jeroglíficos y completarlos y una vez acabado volvemos a usar el mapa para dirigirnos al Palacio del Gobernador. Vamos adelante hasta llegar al viejo escriba ciego Bakkamen, que no nos cae muy bien y con el que ganamos un buen enemigo, y regresamos a nuestro dormitorio.