“Saldremos con el corazón, queremos ganar diez años después”

Hace 15 años, Maica García era una joven boya que apuntaba alto en el waterpolo y que se colgó la plata en el Europeo de waterpolo celebrado en Málaga. Ni en sus mejores sueños podría imaginar lo que vendría después. Medallas y más medallas, incluso tres de oro en Europeos y otra mundial, en 2013, en unas Picornell a reventar. Diez años después la Selección femenina de waterpolo puede repetir corona ante Países Bajos este viernes (11:00, Teledeporte) en los Mundiales de Natación de Fukuoka. Después de superar los “nervios” ante Hungría y Australia en los cruces, de controlar bien ambos encuentros porque “la experiencia es un grado”, la boya de la Selección afronta “orgullosa” otra final y destaca que España está “impresionante” en defensa. El camino que las puede llevar de nuevo a reinar en el waterpolo mundial.

-Diez años después, pueden volver a ser campeonas del mundo. ¿Qué le sugiere el dato?

-No me imaginaba estar aquí diez años después. Todo ha pasado rápido, pero llevamos muchas finales. Me parece increíble volver a jugar otra, aunque me hubiera gustado hacerlo contra Estados Unidos, poder ganarles.

-En 2022 y 2023 Estados Unidos ha perdido más partidos que en la anterior década. ¿Qué piensa de ello?

-Me lo podía esperar. Después de Tokio ya vimos que ellas no eran las mismas, que se les podía plantar más cara, que seguían teniendo un bloque sólido pero que también podían fallar. En la Liga Mundial les ganó Hungría, y también sorprendió. Llevaban ganando Ligas Mundiales siempre. Pensaba que si pasábamos primeras de grupo aquí en Fukuoka podíamos ser capaces de ganarlas. Ojalá hubiéramos sido nosotras las que las echáramos. Pero hay equipos potentes en el circuito: Italia pierde con Grecia y luego Italia le gana a Estados Unidos y Australia se impone a Grecia. Hay mucha competitividad. Todos los equipos tenemos dominados a otros, quizás por un tema mental o táctico.

-¿Y a Países Bajos le tienen dominado?

-Los dos equipos somos merecedores por el trabajo que llevamos, y reviviremos el primer partido de grupo. Será diferente. Saldremos a por todas, queremos quitarle el reinado a Estados Unidos, queremos ganar el Mundial diez años después. No será fácil. Países Bajos nos tienen ganas, se quedó a las puertas muchas veces y nunca nos quitaron medalla. Espero una final muy dura, muy táctica, nos conocemos mucho porque la mitad de su selección juega en la Liga. Va ser una final bonita de jugar y de vivir, saldremos con todo el corazón y las ganas para ganar diez años después. Ya no tenemos la presión por la plaza olímpica, toda Europa estaba deseando que ganáramos a Australia.

-¿Por eso ve más abierta que nunca el oro en los Juegos de París 2024?

-Quizás vivo en un mundo paralelo, pero en la final de Tokio creo que eran ganables, aunque el marcador no reflejó la realidad. Lo que está pasando con Estados Unidos es un plus para todos los equipos, nos podemos creer que es posible, podemos optar al oro y trabajamos cada día para ese sueño.

-¿Qué valor le da a la clasificación olímpica directa ya en Fukuoka?

-Muchísima. Lo hablaba con Anni Espar el otro día. Las jóvenes han llegado y los resultados son muy buenos, es básico conseguir una plaza en un Mundial porque ya lo logramos en Gwangju en 2019 también. Cuando juegas un Preolímpico sabes lo que es no dormir, la presión mental... El sobreesfuerzo es increíble. Por eso el doble premio de esta final es maravilloso.

Ampliar

-Hablaba de Anni, quien junto a usted, Pili Peña y Laura Estar son las veteranas, las que lo han vivido todo. ¿Cómo se reparten el liderazgo?

-Son roles que con la experiencia vas cogiendo y te vas dando cuenta cuando te llegará el momento de tener otra función. Sobre todo tenemos que ayudar a las que entran, darle los mejores consejos, aportarles la experiencia... Y si tienes los minutos, dar ejemplo. No todo debe pasar por las veteranas, nosotras solo les damos las claves, las teclas para que todo funcione bien. No es nada difícil para nosotras. Lo hablamos y es fácil.

-Ha habido un amplio relevo generacional después de Tokio, y ustedes han sido campeonas de Europa, de la Liga Mundial y ahora están en la final en Fukuoka. ¿Un relevo inmejorable y más rápido de lo esperado?

-Ha sido súper rápido, muy fácil para las jóvenes y para nosotras. Nos ayudamos mucho. Se lo ponemos muy fácil, y ellas curran mucho, aportan dentro y fuera. El año pasado no era nuestro objetivo el Mundial de Budapest, porque se decidió en febrero para jugarlo en junio, pero somos un equipo ambicioso. Estados Unidos fue una piedra, no tuvimos un camino fácil. Luego ganamos Europeo y Liga Mundial y eso fue un chute para las más jóvenes.

-Judit Forca ya no es de las jóvenes, pero sus goles son determinantes como los de Elena Ruiz, de 18 años y quien lo ha ganado casi todo ya. ¿Qué importancia tienen?

-Judit es una de las mejores del circuito, lo está demostrando, cuando está en el agua tiene un cañón, nos da seguridad porque cuenta con una altísima efectividad. Es la mejor jugadora de Europa, un premio muy merecido, estamos felices de que siga. Elena entró en Tokio muy joven: ya venía con cualidades y solo se ha tenido que moldear. Luego, los minutos que ha cogido en estos dos años le han ayudado a crecer mucho más rápido. Se lo tiene que creer, tiene que ir a portería sí o sí, pocas jugadoras tienen ese lanzamiento; solo tenemos que dejarle el carril libre. Le queda mucho camino. Puede mejorar en otros aspectos, pero tiene algo buenísimo.