La revancha indiscutida más esperada

La gente ama las revanchas, y más si hay un título indiscutido de por medio. Tras la segunda lucha por los cinturones de los pesos pesados entre Tyson Fury (34-2-1, 24 KO) y Oleksandr Usyk (23-0-0, 14 KO), el Kingdom Arena de Riad, Arabia Saudí, volverá a acoger una revancha, pero esta vez en el semipesado. Artur Beterbiev (21-0-0, 20 KO) y Dmitry Bivol (23-1-0, 12 KO) se verán las caras de nuevo el sábado (17:00 horas, DAZN) por las cuatro coronas. El primer choque terminó con mucha polémica y con un invicto arrebatado. “Todo va muy bien, hemos tenido un buen campamento”, revela Bivol a AS antes del choque.

La unificación del peso semipesado se hizo esperar. El Consejo Mundial de Boxeo (CMB), debido a la ofensiva rusa ante Ucrania, no quería que ningún boxeador ruso pelease por su cinturón. Beterbiev, el campeón, tiene la nacionalidad canadiense a pesar de ser de Rusia, ya que ahí residen su mujer y sus hijos, por eso podía portar la corona, pero Bivol tenía otra situación muy diferente. Sus padres nacieron en Moldavia (teniendo su madre ascendencia coreana) y vivieron en Kirguistán hasta que cumplió 11 años, que se trasladaron a San Petersburgo y ahí le dieron la nacionalidad.

Tras una larga espera el veto desapareció y pudieron subir al ring a pelear. En octubre del año pasado, también en Riad, los rusos enfrentaron y Beterbiev terminó llevándose la victoria por una controvertida decisión mayoritaria. Fue la primera vez en su carrera profesional que llegó a las cartulinas, y gran parte del público no estuvo conforme con la opinión de los jueces. Tampoco lo estuvo Bivol, que presentó una protesta oficial y reclamó una revancha. Pero eso no es algo que esté en su mente ahora mismo. “No pienso en eso, solo pienso en que tengo que mejorar y que puedo ser mejor”, responde contundente el ruso.

Han pasado cuatro meses y ya tienen el segundo combate que el boxeo pidió desde que sonó la campana. “¿La diferencia con el primer combate? Que será en una fecha diferente”, bromeó Bivol. El ruso ha estado trabajando duro para poder recuperar el cinturón AMB que perdió en la primera disputa, además de su invicto, y los CMB, OMB y FIB de Beterbiev. “Ya nos conocemos y nos preparamos de manera más específica. Mi equipo y yo nos hemos preparado bien y espero que esta vez seamos mejores, al igual que el combate”, sentencia el de Kirguistán.

Una revancha y un futuro abierto

“Creo que será una buena pelea para los aficionados al boxeo. Creo que puedo ganar”, explica el ruso. Bivol ya ha probado la gran pegada de Beterbiev, uno de los boxeadores más temidos que había terminado todos sus combates antes del límite. “Es un gran peleador, es muy bueno y es genial que tengamos a este tipo de peleadores en nuestra división de peso”, asegura.

Se ha hablado mucho de una posible revancha con Canelo Álvarez (6-2-2, 39 KO), ya que, junto a Floyd Mayweather, son los dos únicos boxeadores que han conseguido derrotar al tapatío, pero no es algo que ocupe su mente. “No pienso en que habrá después. Estoy enfocado solo en el 22 de febrero. Después de esta pelea, veré que pasará a continuación porque tenemos un montón de opciones”.

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Y es que Bivol no se estanca y las opciones que contemplan él y su equipo, son muchas. “Tenemos muy buenos peleadores en nuestra división. Una tercera pelea con Beterbiev, (David) Benavídez, o el peso crucero. Hay muchas divisiones diferentes, caminos diferentes. Después, hablaremos sobre otros planes”, sentenció el ruso. Lo que está claro es que el futuro de Dmitry será mucho más brillante si consigue ceñirse los cinturones.

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