Iris Tió, sexta al son del violín de su madre

Después de la retirada por su segunda maternidad de Ona Carbonell, la natación artística tiene que reinventarse para volver al medallero. La solista española, ganadora de 23 medallas mundiales (la que más amenazada por Katie Ledecky), era una garantía en las pruebas de solo, pero ahora España busca otro icono con su propio estilo. Lo ha encontrado en Iris Tió, de apenas 19 años, hija de músicos, con una sensibilidad en el agua única, bautizada por las grandes leyendas de este deporte. Todos hablan maravillas del futuro de la barcelonesa, que se estrenó en el Mundial de Budapest como solista en la rutina libre.

Con una puntuación de 89.0333, acabó sexta en la preliminar, a 1,4 puntos de la medalla, una distancia no demasiado lejos teniendo en cuenta su juventud, aunque existe un matiz importante: ni Rusia ni China tomaron parte en este campeonato. Tió se situó a más de cinco puntos de la que ganará el oro, la japonesa Yukiko Inui (94.5667). La española interpretó una coreografía especial, con una música en la que ha participado su propia madre, que ha compuesto partes del violín del tema de Florence The Machine titulado You have Got The Love. “Trata sobre el amor, que puede tener muchas capas”, comentó una ilusionada Tió en la previa.

La solista española quedó por detrás de la ucrania Marta Fiedina (92.6333), la griega Evangelia Platanioti (90.4000), la italiana Linda Cerruti (90.2667) y la austriaca Vasiliki Alexandri (89.5667). La española intenta acercarse lo máximo posible a la austricada en la final. El programa de Tió es más extenso, pues también participará en las pruebas de dúo y en el equipo.

“Estoy muy contento de mi rutina, de cómo he nadado. Pusimos unos objetivos a nivel de giros, de mirar al público y a los jueces. Mayu estaba muy contenta. Es un punto positivo que salga la última en la final, la aprovecharé al máximo. Analizaré bien el vídeo y analizaremos que queremos mejorar para la final, se intentará conseguir más puntos”, comentó la barcelonesa.