“Hace un año demostré que no era solo una promesa”

Con Mireia Belmonte lejos de las competiciones este 2022 después de rozar su quinta medalla olímpica en los Juegos de Tokio, Hugo González es la principal estrella española de estos Mundiales de Natación que han arrancando este sábado en Budapest. El mallorquín que se crió en Murcia y que creció en Madrid lleva ya cinco años en Estados Unidos formándose personal y deportivamente. Es un de los referentes de la Universidad de Berkeley, reciente ganador de la NCAA (campeonatos universitarios), y en España coge el testigo del aspirante a los podios. Ya lo demostró en 2021 con sus tres medallas en el Europeo en la misma piscina húngara y en Tokio al nadar su primera final olímpica en los 100 espalda. Ahora quiere dar un paso más. Hugo busca mejorar marcas y eso le puede llevar a un podio internacional.

¿Cómo se plantea este Mundial?

Nadaré toda la espalda, los 200 estilos y el relevo 4x100 estilos. Mi objetivo es parecido al del año pasado, que no es otra cosa que nadar lo más rápido posible, al menos repetir mis marcas o mejorarlas.

Hace un año, en el Europeo de Budapest, ganó tres medallas. ¿Qué supuso eso para usted?

Me supuso abrir los ojos. Los resultados me convencieron de que no era todo una promesa. Desde mi etapa infantil y júnior se hablaba mucho de mí, siempre comentaban de lo que podría llegar a hacer y el año pasado fue la primera vez que conseguía resultados a nivel absoluto. Fue un comprobante, la realidad.

¿Le beneficia nadar en una piscina que conoce?

Me gusta mucho, es la piscina más rápida en la que he nadado y espero que se repita.

No estarán en las pruebas de espalda ni Kolesnikov ni Rylov, los rusos. ¿Eso le da un empujón para conseguir un podio?

Teniendo en cuenta que en los 100 espalda siempre han estado en el top 8, son dos puestos extra, técnicamente me beneficia a mí y a todos. No creo que sea un factor importante, lo importante es centrarme en mí.

¿Cree justo que Rusia no participe?

Prefiero abstenerme.

¿Cómo llega a estos Mundiales con respecto al año anterior?

Tengo más experiencia. El último año es donde más competiciones he estado realizando: Juegos, Europeos, NCAA... Me ha ayudado a saber lo que me viene bien, a entender mi cuerpo y a controlarlo.

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Habla de la NCAA, ¿qué supuso ganar ese título?

Supuso la guinda del pastel después de cinco años de estudios en Estados Unidos. He vivido cambios de universidades, me costó bastante encontrar un lugar donde tuviera estabilidad, motivación y estuviera contento. Conseguí un título individual y por equipos.

¿Seguirá otro año allí?

No lo tengo claro del todo. Como en 2020 cancelaron las finales de la NCAA, nos dieron un año extra de elegibilidad, podría cogerlo o dejarlo ir. Tengo que pensarlo este verano. Tengo cosas en el aire.

Ni en el Europeo ni en los Juegos hubo gente en la grada, sí habrá en este Mundial. ¿Cómo os ayuda eso?

Estará genial poder salir, que estén los padres en la la tribuna, los espectadores y los amigos. Eso supone motivación al salir de la piscina y alegría para el deporte.

Usted que los conoce bien, ¿cómo llegan los americanos a este Mundial?

Es un país donde la cultura del deporte la llevan en la sangre. Darán el máximo nivel, que sea un Mundial por sorpresa no hará que vayan más lentos.

¿Se nota más arropado por la Federación?

Ha habido unos cambios. Sean Kelly, el director técnico, se pasó por Virginia y también fue a Brasil a ver a Alberto Martínez (aguas abiertas). Lo demás, a nivel personal, no he visto demasiado. Sigue igual sin buscar definirlo como bueno o malo, queremos competir. Han aceptado que compita y me parece perfecto. Hace unos años eso no lo permitían. También hay casos como el de Nico García, que fue finalista olímpico y entre horarios y todo no pudo cuadrar para entrenar a tope en el Nacional y no está en el Mundial.

Sus otros dos hermanos también han ido a Estados Unidos a entrenarse y estudiar aunque sea un menor periodo de tiempo. ¿Eso les viene de familia?

Tenemos la suerte de que nuestra familia es de distintas partes. Mi madre es brasileña y hemos vivido otras experiencias en otros países. Aprovechando que teníamos buenas marcas, vemos una buena opción ir fuera para coger experiencia, para aprender un idioma, para encontrar más oportunidades profesionales. Y eso es lo que han hecho mis hermanos. ¿Por qué quedarnos? Siempre puedes volver, la oportunidad de irnos no la tienes siempre.