Rahm, problema a la vista
El nuevo formato que propone el PGA para competir con el LIV aumenta el número de eventos para los golfistas, lo que podría ser un problema para los europeos que tienen que disputar la Ryder Cup.
Más torneos, campeonatos con los mejores golfistas, nuevos rankings de clasificación, premios más altos... Estas son algunas de las medidas que se han llevado a cabo para hacer competencia al LIV ya que el campeonato saudí está convenciendo a muchos jugadores para unirse a sus filas.
Tiger Woods y Rory McIlroy son los dos representantes de los jugadores que han dado el visto bueno a estos cambios con el objetivo de mejorar la imagen del circuito profesional de golf. Los cambios, anunciados por Jay Monahan el comisionado del PGA pueden causar ciertos problemas a jugadores específicos que están dentro del convite. Entre ellos, el español Jon Rahm.
En general, los principales jugadores que tendrían posibles desacuerdos con las nuevas integraciones en el circuito, serían los europeos. El nuevo formato del PGA obliga a los competidores a disputar 20 torneos durante la temporada. Además, para incentivar a los golfistas a hacer todo lo posible para poder disputar estos eventos, se ha mejorado la cifra de dinero que se repartirán entre los participantes. Sumado a que según se jueguen, se sumarán puntos a un ranking para colarse en los torneos cerrados de los mejores 20 golfistas del circuito.
El gran problema que se encuentran los golfistas de Europa a la hora de jugar estos torneos son los otros cuatro obligatorios del DP World Tour que necesitan jugar para clasificarse para la Ryder Cup. Esto condiciona mucho el calendario de los golfistas por no poder compaginar estos dos torneos a la vez.
“Si tenemos que jugar los 20, entonces al 100% que esos cambios me pondrían en una posición difícil. Si voy y juego en Europa en otoño como voy a hacer, tengo que jugar de enero a agosto 20 veces. Creo que este es el decimoséptimo evento que juego desde enero y no creo que pueda añadir ninguno más” comentó Rahm que quiere jugar la Ryder Cup, el gran problema. “Especialmente con la Ryder Cup y tener que jugar cuatro partidos en Europa, creo que es demasiado pedir y no me sorprendería que se revise un poco la regla o que se haga una excepción con ciertos jugadores. Si lo hacen con jugadores como Rory o como yo, deberían hacerlo con todos”, añadió el español.
El PGA tendrá que buscar una solución a otro problema que se le viene encima. Aunque para este hay una fácil solución y existe complicidad entre ambas partes que facilitarán las cosas. De momento, Jon Rahm busca encontrar un acuerdo con el circuito para que todos estén contentos. La aparición del LIV provocó un terremoto en el mundo del golf y las consecuencias deben solucionarse para que el rumbo del PGA sea próspero.