Finau aplaca el hambre de Rahm
El norteamericano se lleva la victoria en México con una tarjeta de -24, tres menos que el número uno del mundo que lo intentó todo y hoy cumple 50 semanas al frente.
La tercera jornada de Jon Rahm en el Abierto de México quedará como una exhibición más del ‘León de Barrika’, ese genio con un hierro, una madera o un putt en las manos. 61 golpes para un -10 que le dejó a dos impactos de entrar en el selectísimo club de -60 en un recorrido completo de 18 hoyos en torneos profesionales desde que hay registros, algo que solo han logrado una veintena de jugadores. El Resort Vidante de Puerto Vallarta fue el inicio de la increíble racha que le había llevado a ganar siete torneos en un año natural con quince Top 10 en 24 torneos disputados. Y a liderar con mano de hierro el ranking mundial, trono que cumple el lunes su 50ª semana total.
“No cambiaría ninguno de los golpes que he pegado”, decía el español tras ese día mágico que le dejaba a dos golpes del norteamericano Tony Finau, número 16 del escalafón antes de desembarcar en el torneo a las orillas del Pacífico. La jornada definitiva se presentaba como un nuevo asalto de Rahm a otra victoria, pero sus rivales también querían demostrar que la varita mágica del vizcaíno no es invencible. Jon empezó cumpliendo con el campo mexicano en los seis primeros hoyos hasta que su hambre voraz empezó a dar bocados. Birdies en el 6 y el 7 para cerrar la primera parte en -2, -19 total.
Sin embargo, Finau y sus compatriotas Brandon Wu y Akshay Bhatia no le iban a la zaga. -3, -2 y -1 respectivamente en los nueve primeros hoyos. Por detrás el argentino Emiliano Grillo y el estadounidense Cameron Champ bordaban el juego pero su distancia era demasiado lejana salvo hecatombe del cuarteto de cabeza. Llegaba el momento definitivo, ese que templa o desquicia nervios cuando se reparten las papeletas de la victoria. Bhatia enlazaba dos bogeys consecutivos y perdía comba. Wu era muy irregular, del desastre de un doble bogey en el 10 pasaba a dos birdies seguidos para convertirse en la alternativa al duelo Finau-Rahm.
El espigado jugador de Utah, que rechazó ofertas para hacer carrera en el baloncesto y tiene Top 5 en los cuatro majors, tiene fama de mal jugador de domingo y de ahí que su palmarés no tenga los títulos (6 en el PGA Tour) que su talento atesora, pero en México y con Rahm cara a cara disputándole el título se sacó la espina. Siguió creciendo a base de buenos golpes, muchos birdies y sin errores. Precisión tomando calles y greenes. Rahm y Wo apretaban con todo, pero Finau no aflojaba. Victoria para el estadounidense de 33 años con un total de 260 impactos (-5 en la jornada final), tres de ventaja respecto a Rahm (-4 en la última vuelta) y cinco sobre Wu (-3).