La ISL del ucranio Grigorishin se cancela por la "guerra"
En un comunicado alega los problemas comerciales que se derivan del conflicto y dejan la puerta abierta a celebrar la competición en 2023 ya que se avecina un conflicto "incierto".
La International Swimming League (ISL), promovida por el empresario ucraniano Konstantin Grigorishin, ha enviado un comunicado esta misma tarde para avanzar que la competición queda aplazada hasta al menos 2023 debido a la guerra que afecta a Ucrania y Rusia. Este movimiento acuático paralelo a la Federación Internacional de Natación (FINA) estaba avalado por los deportistas, pero se ha visto obligado a posponer la edición que debía comenzar a finales de verano por los problemas económicos que se derivan de "la guerra".
"Cancelamos porque no podemos comprometernos a pagar los viajes, los entrenamientos y las estancias", explica el comunicado dirigido a los propios deportistas en los que hablan de que es la mejor decisión al preveer un conflicto "incierto". La ISL no dejará de trabajar y aprovechará este año de asueto para escuchar a los nadadores, intentar otras vías comerciales y mejorar. Aunque lamentan el daño causado a los deportistas, consideran que "es lo mejor para nuestra sostenibilidad".
La ISL, que nació en 2019, acumula tres ediciones exitosas en la que diferentes equipos alrededor del mundo, con sede en Estados Unidos, Gran Bretaña, Hungría o Italia, capitaneados por los mejores nadadores, competían en piscina corta en distintas estaciones. Un formato espectacular, muy televisivo, con una fase final en Las Vegas. Los nadadores recibían suculentos premios en metálico, aunque en esta última edición ha habido problemas en algunos pagos.
El calendario de la temporada está cargado de competiciones, lo que era otro problema para celebración de este circuito que acostumbra a comprender los meses de septiembre a diciembre. En junio hay Mundial en Budapest, en agosto se celebrará el Europeo en Roma, mientras que el Mundial de piscina corta tendrá lugar en diciembre pero no en Kazán, como estaba previsto, sino en otra ciudad aún por confirmar.