El Fútbol Emotion logra una victoria que vale su peso en oro
Con el triunfo (4-2), el conjunto maño puede seguir soñando con mantener la categoría, a pesar de que la victoria no le saca de la zona de descenso.
El Fútbol Emotion Zaragoza logró una sufrida victoria sobre el Real Betis que vale su peso en oro porque le permite seguir soñando con mantener la categoría, a pesar de que el triunfo no le saca de la zona de descenso. La victoria sobre el conjunto andaluz deja al Fútbol Emotion a un punto de los verdiblancos y del Manzanares, que son quienes marcan la permanencia, y le mete de lleno en la lucha por evitar el descenso.
El inicio del partido fue clave para la suerte del partido gracias a una gran salida del equipo de Jorge Palos que a los diez minutos ya ganaba por 3-0. En un visto y no visto el conjunto aragonés se puso con dos goles a favor gracias a una puesta en escena mucho más intensa que la de un Betis que pareció encogido y temeroso, todo lo contrario que los maños que, conscientes de la importancia de una victoria, presionaron bien y ahogaron al equipo andaluz.
Cuando apenas habían transcurrido cuatro minutos un potente zurdazo de Sergio Jamur adelantó a los locales que, un minuto después, y en una contra fulgurante, pusieron el 2-0 obra del internacional argentino Angel Claudino.
El Fútbol Emotion Zaragoza era claro dominador del juego y de las ocasiones y el tercero llegó en una acción de estrategia en la que Rubén Cornejo, al intentar cortar un pase, envió el balón a las mallas de su portería en el minuto 10. A partir de ahí el técnico bético, Juan Antonio Miguel "Juanito", buscó acortar distancias con portero-jugador hasta el final de este periodo pero el equipo maño se defendió bien y aunque los visitantes tuvieron un par de buenas ocasiones para haber acortado distancias, también el conjunto zaragozano pudo haber aumentado la cuenta con un par de lanzamientos desde su puerta, tras robar balón, que salieron desviados.
Juanito no repitió portero-jugador tras regresar de vestuarios pero viendo que su equipo no generaba ningún peligro decidió volver a colocarlo en pista cuando apenas habían transcurrido tres minutos, circunstancia que fue providencial porque uno más tarde Emilio Buendía acortó distancias. El juego se convirtió en un asedio constante por parte de los sevillanos que volcando el juego hacia el lado derecho consiguieron poner el 3-2 en el minuto 30, obra de nuevo de Buendía.
El conjunto zaragozano sufría enormemente para defenderse en inferioridad pero unas veces las apariciones del meta Iván Bernad, y en otras la falta de puntería foránea permitieron llegar a los propietarios del terreno hasta el final por delante en el marcador. A falta de tres segundos para conclusión el veterano Carlos Retamar cortó un saque de banda de su rival y anotó el cuarto prácticamente sobre la bocina, un tanto de vital importancia porque le da ventaja a su equipo en la diferencia particular de goles ya que en Sevilla se impuso el Betis por un solo gol.