Sandra Sánchez es puro oro
María Torres, campeona en kumite. Damián Quintero vuelve a chocar con Ryo Kiyuna y se lleva la plata, su tercera medalla consecutiva en unos Mundiales.
Lo hizo. Sandra Sánchez logró que sonara el himno español en Dubái con una medalla de oro colgada en el cuello. Defiende con éxito su título Mundial conquistado en Madrid en 2018 en un año mágico: ha ganado todos los torneos que ha disputado en 2021, y reúne los cinco títulos que ella quería redondear: Europeo, Nacional, Juegos Olímpicos, Premier, y ahora Mundial. Pequeña de estatura, la talaverana es como un Carpanta que se lo come todo, con su sonrisa y alegría arrebatadoras. Su compañero de Selección, Damián Quintero se quedó con la plata: tres consecutivas, y en tres finales frente a Ryo Kiyuna, una especie de muralla imposible para el resto con cuatro títulos de campeón del Mundo consecutivos.
Hoy Sandra ha hecho historia. Lo sabe. Y también que será con la perspectiva del tiempo cuando se destaque su caso. Japón envió a una nueva rival para la española, Hiraku Ono, porque Shumizu ya estaba prácticamente agotada mentalmente por la española. Pero no hubo caso porque además de lo que representa para Sandra el Mundial, tenía otra misión especial: mostrar su respecto y reconocimiento a Dubái, el país que confío en ella, el que la envió al estrellato, donde en realidad cambió la historia del katas mundial.
Damián, por su parte, sabía las limitaciones en su final. No se trata de hacer un kata espectacular, sino de quitarle la aureola a Ryo, el hombre que domina la década. Es más, de los 21 torneos de la Premier que ha disputado en su carrera, el japonés ha ganado 19. Y es el campeón olímpico. Estéticamente, y los dos finalistas con la misma técnica, chan dai, posiblemente Damián fuese el ganador moral, pero todo lo que arrastra de intocable Ryo le hizo ganador con más de un punto sobre el español.