La remozada España aprueba el examen frente a Rumanía

EI amistoso de esta noche en Avilés frente a Rumanía le ha servido a España para que aumente en dos jugadores la nómina de Hispanos con Jordi Ribera, el extremo Dani Fernández (Cangas) y el central Pol Valera (Granollers) que entró en el grupo por el lesionado Tarrafeta. El resto ya había jugado mucho o poco a las órdenes del seleccionador, pero el grupo sólo llegaba con cuatro entrenamientos: 33-29 (16-15).

Ese detalle del poco trabajo como colectivo justifica muchos de los errores en ataque y en defensa, y que a la Selección le diese resultado el juego menos elaborado y un poco la apuesta individual.

No hay grandes novedades a reseñar, porque en la pista se vio de lo que son capaces los jugadores que destacan en la Liga: Dani Fernández y Pérez Arce, goleadores con descaro; Izquierdo y Chema Márquez, sin reparos a la hora de lanzar; y quizá los centrales Casado y Valera fuesen los más recatados a la hora de asumir decisiones individuales.

Como esta Rumanía de Xavi Pascual salió respondona, y como la mejor manera de superar los exámenes es con victorias, Ribera tampoco experimento en exceso, y a Gedeón Guardiola también le mantuvo como pivote ofensivo, idea que le ronda desde hace años para evitar un cambio.