Una Milla Internacional de muchos quilates para Madrid

Igual que Nueva York tiene la Milla de la Quinta Avenida, Madrid también tendrá ya su gran milla. Será este domingo 3 de octubre, en el corazón comercial de la ciudad, en la calle Serrano. Desde Goya a la Puerta de Alcalá. Dos vueltas y media a un circuito con giros de 360 grados: 1.609 metros. Una distancia mítica, con la máxima élite nacional en acción y cerca de 2.000 corredores populares, repartidos en tandas de 80, que saldrán cada 12 minutos. Una fiesta del atletismo en pleno centro.

Surcarán el asfalto capitalino hombres como Fernando Carro, Adel Mechaal, Jesús Gómez, Saúl Ordóñez o Dani Arce, y mujeres como Marta Pérez, Esther Guerrero, Lucía Rodríguez o Clara Viñarás. El eritreo Haileselassie, quinto en 3.000 obstáculos en Tokio, es el gran nombre internacional. Cartel de lujo y recorrido de lujo. ¿Se puede pedir más?.

"Llevo sin correr nada desde París. En las vacaciones he hecho algo de carrera continua. La exposición es máxima estando entre los líderes de la carrera, pero intentaré jugar mis cartas", cuenta entre risas Carro, que se centra en "disfrutar". Porque la ocasión lo merece: "Qué zona. Qué lugar más emblemático para correr una milla", celebra el madrileño de Canillejas. Y añade un detalle técnico: "En la (San Silvestre) Vallecana cuando pasamos por Serrano picamos para abajo. En esta tendremos algo de subida".

Igual de emocionada se muestra la soriana Marta Pérez. "Me parece una carrera muy especial, me emociona que se haga en Madrid. No paro de decirlo pero es que es verdad. Es una manera de acercar las pruebas más de pista, lo que hago yo al final, a la calle y a la gente", afirma. Que sea en una zona tan especial de Madrid, su "segunda casa", en la que lleva muchos años "viviendo", es un aliciente muy importante para Marta.

Pérez agradece que haya prueba popular, y poder "compartir el privilegio de correr por una calle como Serrano cortada para ti". Las sensaciones iniciales no dejan dudas: la Totalenergies Milla Internacional de Madrid apunta a convertirse en un clásico de la ciudad.