Jalidov sella el billeta a Tokio

España ya ha hecho historia en los Juegos de Tokio. Por primera vez desde Barcelona 92, donde la Selección llevó ocho púgiles, asistirá con más de dos representantes. Gabriel Escobar y José Quiles lograron el billete antes de la cancelación del preolímpico y en la reanudación Gazi Jalidov (81 kg) ha conseguido este sábado el suyo. El hispano-ruso, afincado en Logroño, se impuso por decisión dividida (28-28, 26-30, 27-29, 26-30 y 27-29) al turco Bayram Malkan. De nuevo Gazi volvió a deslumbrar. Hizo lo que acostumbra: metió ritmo e hizo daño con sus golpes. Con las derechas voladas puso en serios aprietos al turco, quien recibió una cuenta al final del segundo round y que acabó salvado por la campana. En el segundo, Malkan embarulló un poco la pelea y eso le dio igualdad. Los mejores golpes fueron de Gazi, pero tres jueves vieron mejor al turco. En el último, Malkan empezó a ensuciar la pelea y eso enfadó a Jalidov, quien sacó todo y volvió a conectar con gran dureza. Le fallaron las piernas a su oponente de nuevo, pero no recibió cuenta. No lo necesitó el español, que logró el triunfo. Aseguró plaza en Tokio y medalla. Ahora deberá jugarse el pase a la final del torneo (la posición repercute en el ranking de los Juegos) con el azerí Loren Alfonso Domínguez.

El primero en salir al ring fue Enmanuel Reyes Pla (91 kg). A sus 28 años, el hispanocubano está en un gran momento en su carrera. Desde que obtuvo la nacionalidad ha cosechado solo victorias y en el ensogado de París demostró el motivo. Es una delicia verle en acción. Toma la distancia y el tiempo con suma facilidad, se mueve bailando, varías los planos y ángulos y cuenta con una precisión digna de estudio. No en vano, tiene una experiencia superior a los 300 combates, y se nota. El irlandés Afanasev Kirill poco pudo hacer ante la superioridad manifiesta de Reyes Pla, quien se impuso por clara decisión unánime (30-27, 30-27, 30-27, 30-27 y 30-25). Está a una victoria de clasificarse para los Juegos. Para lograrla tendrá que ganar, este domingo, al búlgaro Radoslav Pantaleev (segundo cabeza de serie), quien llega más fresco, ya que en octavos ganó por incomparecencia de su oponente.

Por su parte, también fue el día del redebut de Gabriel Escobar (52 kg), quien ya partía con la plaza para los Juegos garantizada. En su caso, por tanto, el viaje a París era por el oro como único objetivo. Cuanta mejor posición logre en el torneo, más arriba estará en el ranking con el que se sorteará el cuadro olímpico. Este sábado le tocó verse las caras con el irlandés Brendan Irvine, a quien se impuso por decisión unánime (29-28, 30-27, 30-27, 30-27 y 30-27). El español volvió a dejar claro por qué está en la quiniela de las medallas de Tokio. Dio un auténtico recital de defensa y ataque contra el irlandés. Escobar tenía menos envergadura, pero recortaba esa diferencia cuando quería y sacaba manos rápidas que Irving no era capaz de frenar. Dio una nueva exhibición, asegura medalla y avisa al resto: tiene capacidad de ganar lo que se proponga. En semifinales le espera el francés Billal Bennama.