"Las reglas son las mismas para todos o al menos deberían serlo"

Un pasito pa'lante y un pasito pa'trás. La frase que se hizo mundialmente famosa grancias a la canción de Ricky Martin en 1995 se ajusta a la perfección a lo ocurrido en la final del 1.500 metros del Europeo del pasado viernes en Torun. La carrera que no conoció su resultado definitivo hasta medio día después pese a que el ganador en pista apenas invirtió 3:37.73... sigue coleando.

 Jakob Ingebrigtsen ganó por delante del polaco Lewandowski y del burgalés Jesús Gómez, pero a los pocos minutos se descalificaba el noruego de 20 años por pisar fuera de la pista. El atleta local pasaba a ser oro, Gómez plata e Ignacio Fontes, bronce. Casi tres horas después, pasada la medianoche se anunciaba la recalificación del pequeño de la saga nórdica y dejaba todo igual que al principio.

Pero tampoco acabó ahí la cosa. La ceremonia de medallas estaba prevista para el sábado a las 9:54am y pocos minutos antes se anunciaba el retraso hasta las 14:07 por la contraapelación de los polacos. Ahí empezó la guerra política y las amenazas de abandono del genio del mediofondo. Finalmente el jurado rechó la reclamación y deja el podio como estaba: oro para Ingebrigtsen, plata de Lewandowski y bronce para Gómez.

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El polaco de 33 años, que iba a desafiar de nuevo a Jakob en el 3.000 pero que no pudo hacerlo por rigidez tensional en el cuello, no parece haber digerido lo sucedido hace cuatro días y hoy ha vuelto a la carga con una story en 'Instagram'. Acompañando cuatro fotos de la secuencia de lo sucedido, con flechas y círculos incluidos para resaltar cosas, y una frase: "Jakob Ingebrigtsen fue mejor pero las reglas son las mismas para todos... o al menos deberían serlo".