BALONMANO | COPA DEL REY
El público está de vuelta
La Copa del Rey de balonmano está siendo el primer gran evento deportivo con público en 2021. Toma de temperatura, gel... y mucha ilusión entre los aficionados.
La Copa del Rey de balonmano en el WiZink Center de Madrid es el primer gran evento deportivo con público en este 2021. El viernes, antes del inicio del primer duelo de cuartos (12:00), se notaba que las sensaciones eran diferentes a lo vivido durante el último año. Algunas terrazas del barrio de Goya, donde está situado el pabellón, acogían a reducidos números de aficionados de algunos de los ocho equipos presentes en la capital, especialmente del Bidasoa del Bada Huesca y del Logroño.
Durante viernes, sábado y domingo, el máximo de público permitido era de 1.500, una cifra igualmente complicada de llegar en la situación actual por las restricciones de movilidad de las aficiones. Hay que recordar que Madrid no tiene equipo en la máxima categoría. Las medidas de seguridad reinaban en los accesos al pabellón. Para entrar, revisión de mochila habitual y toma de temperatura, tanto a aficionados, prensa, como toda aquella persona que accediese al pabellón. Una vez dentro, numerosas zonas acordonadas para evitar el cruce de personas en distintos sentidos, con la correspondiente ayuda y explicación del equipo de voluntarios.
Los aficionados, ilusionados, tenían diversos planes para el fin de semana. Algunos, estarían hasta el domingo en Madrid, pase lo que pase con su equipo. Otros, en función de los resultados, reservan noche de hotel día a día. Lo importante es que, a pequeña escala, pero la Copa contó con público. Hace un año, en la Caja Mágica de Madrid, la anterior Copa del Rey marcó un antes y un después, ya que fue justo a las puertas del estallido de la pandemia.
En la pista, los propios jugadores reconocían que es un plus contar con gente en las gradas ya que la motivación, en la mayoría de los casos, aumenta, y más si son tus aficionados los que están presentes. Después de cada parte y de cada partido, un empleado del WiZink saltaba a la pista azul con una máquina para desinfectar a lo largo de todo el 40x20. También los árbitros sienten la presencia de la gente, con algunos aficionados reclamando a favor de su equipo. Unas cosas clásicas, rutinarias, que se habían perdido... y que, poco a poco, están de vuelta. Está Copa del Rey es uno de los puntos de partida.