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FÚTBOL SALA

La revolución francesa de Ortiz, Ricardinho y Humberto

Los tres ases del Movistar causan sensación en el ACCS París: "Queremos que el fútbol sala crezca aquí", cuenta a AS el capitán de la Selección.

Madrid
La revolución francesa de Ortiz, Ricardinho y Humberto
Twitter de Carlos Ortiz

El verano pasado se produjo un viaje de estrellas Torrejón de Ardoz-París, aunque solo con billete de ida. Ricardinho, Carlos Ortiz y Humberto dejaron el Movistar para recalar en las filas del ACCS francés, el proyecto más importante en la historia del fútbol sala en el país vecino.

Después tres meses de competición, la temporada está siendo inmejorable: pleno en Liga con 10 victorias en otros tantos partidos y la friolera de 84 tantos a favor (14 encajados). Goleadas casi cada jornada: 9-1, 14-2, 10-3... “En Francia está claro que somos el rival a batir. Formamos un equipo muy completo con jugadores internacionales”, cuenta Carlos Ortiz, quien fuera leyenda del Movistar y que sigue capitaneando a la Selección. De entrenador está Jesús Velasco, también ex del equipo de Torrejón, por lo que la integración fue sencilla.

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“En ese aspecto, todo va bien. Está claro que aún no dominamos el idioma, pero yo llevo desde marzo dando clases y poco a poco nos vamos entendiendo todos. Queremos que el fútbol sala crezca en Francia y poder soñar con cosas grandes en Europa. Estoy convencido de que tomé la decisión correcta”, recalca Ortiz a AS. El ACCS París, todavía sin las mencionadas estrellas, se proclamó campeón de Liga el pasado año después de que la competición no se reanudase por la pandemia. De esta forma, lograron el billete para la Champions. Ya superaron una ronda y ahora tienen un rival muy exigente en la siguiente, el Pesaro italiano: “Es un sueño, y trabajaremos para lograrlo, pero tenemos que ir poco a poco”.

Un fútbol sala, el francés, que poco se parece al español. “Son jugadores muy físicos, muy fuertes. En lo táctico están varios pasos por detrás”, expica. Lo que desean, además de los triunfos, es que la gente pueda disfrutar de su juego: “Ojalá podamos tener público pronto en todos los pabellones. Los aficionados son fundamentales para seguir creciendo”. Una revolución.