Velasquez dinamita el reinado de Macfarlane en Bellator 254
Juliana Velasquez se impuso por decisión unánime a Ilima-Lei Macfarlane para proclamarse campeona del peso mosca. La hawaiana era la única campeona de la división.
Habitualmente los campeones, por ese status, suelen ser favoritos en sus defensas. Cuando las apuestas marcan lo contrario no se puede denominar sorpresa a lo que ocurra. Eso sucedió este jueves en Bellator 254, último evento de la compañía en 2020. Ilima-Lei Macfarlane llegaba al combate estelar de la noche como la única campeona del peso mosca en la historia de la empresa. Era campeona desde noviembre de 2017 y afrontaba su quinta defensa. Podía marcar un hito, pero todo tiene un inicio y un fin. El de su reinado lo encontró en el Mohegun Sun Arena.
Juliana Velasquez, que también llegaba a la lucha invicta, la destronó. Ganó por decisión unánime (48-47, 49-46, 48-47) una pelea vibrante. Los dos primeros rounds fueron muy cerrados, pero ninguno de los jueces dudó que eran de la brasileña. Velasquez, quien proviene del judo, logró mantener a raya a la hawaiana con su jab. Además, supo controlar los intentos de derribo. Desde el tercer round la pelea comenzó a variar. Macfarlane conectó una buena patada en la cabeza de Velasquez, pero la ya excampeona cayó de cabeza contra la jaula y se hizo un corte importante en su ceja. El asalto acabó mal para ella, ya que con una gran rodilla también finalizó el round sangrando por la boca y la nariz.
Eso no restó a Macfarlane, sumó. En el cuarto asalto logró al fin el derribo y sacó muchos golpes. La pelea había estado cerrada de inicio y todo podía pasar. Velasquez intentó mantener la distancia y acabó haciendo una gran proyección, como buena judoca, pero antes la hawaiana había puesto más intención. Tocaba esperar a los jueces, quienes dieron vencedora a la aspirante. "Simplemente me superó. Fue como si no hubiese encontrado mi ritmo hasta el derribo en el cuarto asalto. Su plan de pelea fue acertado. Es la campeona, se lo merece", apuntó sin paños calientes Macfarlane tras terminar la pelea. "Esto es como una medalla de oro", replicó Velasquez. La felicidad la invadía, y es que acababa de quebrar el reinado de Macfarlane, no era para menos. Bellator tiene una reina.