Los madrileños refuerzan una temporada más la Asobal
Una veintena de jugadores de la Comunidad están enrolados en equipos de la élite masculina. Los hermanos Márquez, juntos en Granollers.
Joseja Hombrados, presidente de la Federación Madrileña de balonmano y jugador del Guadalajara, se lamenta por la falta de un equipo madrileño en la élite masculina, "porque la Comunidad sí tiene cantera en estos momentos". Y la realidad es que más de una veintena de madrileños, o formados aquí, está reforzando a la Liga Asobal en unos años en los que es muy complicado vivir exclusivamente del balonmano. Por ejemplo, el Guadalajara es el que más se beneficia de la cantera madrileña, porque un tercio del equipo procede de Madrid: además de Hombrados, Gallardo, El Korchi, Sanz, Rodríguez y Díaz.
Eso sí, el Quabit Guadalajara ha perdido a otro madrileño, Chema Márquez, que ahora juega en el Granollers con su hermano Alejandro Márquez, también madrileño. Que el Alcobendas haya tirado la toalla esta temporada de catarsis le ha venido bien al Cangas, que se ha llevado a Santi López y a un proyecto de pivote de mucho futuro, Alberto Martín, de 19 años, en el que confía el entrenador Moyano, el único técnico de Madrid presente en la Asobal este curso.
De todos cuantos están enrolados en la máxima categoría española los tres únicos internacionales absolutos son Hombrados, Chema Márquez y Juan del Arco, de Leganés y otro trotamundos como Joseja, que esta campaña milita en el Anaitasuna de Pamplona, donde comparte vestuario con otro canterano madrileño de 20 años, Héctor González.
El protagonismo de los madrileños también llama la atención en los tantos, y Nacho Valles lidera ahora la tabla de goleadores en las filas del Sinfín de Santander, donde también juega otro de los porteros madrileños, Ernesto Sánchez, formado en el Leganés. Carlos Calle, ahora en el Valladolid, procedente del Coslada y el Alcobendas, es otro de los especialistas en la portería, donde juega con Jorge Serrano, formado en el Villaviciosa de Odón.
Sin equipo de élite en Madrid, otro central de calidad, Sergio Pérez, juega esta temporada en Huesca tras pasar por el Teucro; como Nicolás López, que llegó al Villa de Aranda del Lanzarote tras formarse en Alcobendas.