El Barça cumple el expediente en la visita al Zaporozhye

El Motor Zaporozhye mantiene la hegemonía incuestionable en Ucrania, pero cuando abandona la competición doméstica simplemente en un equipo más. Eso sí, de los conjuntos que dan quebraderos de cabeza, porque si te sorprenden son dos puntos que luego cuesta remontar. Pero el Barça no es de los que por contrato verbal con sus entrenadores no se permite la sorprensa: 25-30 (11-13) para cumplir el expediente y regreso a casa con un debut cómodo en la Champions de esta campaña, donde los azulgrana son el equipo a batir.

El partido tuvo la historia que quiso el Barça, que durante la primera parte agigantó al portero bielorruso Ivan Maroz, el héroe de los ucranianos, con 25 paradas en total (le marcaron 29 goles), muchas de ellas de mérito. Controlado el marcador, el Barça tampoco se exprimió, mantuvo un ritmo de crucero sin apretar, y como en esta salida se quedaron dos zurdos en casa, Barbeito tuvo que gestionar laterales derechos para dar descanso a Mem con primera líneas diestros. 11-13 al descanso. Es de suponer que lo tendría bien hablado con Xavi Pascual, que vio el partido en su cuarentena en la ciudad condal.

Lo que pasó en la segunda parte era previsible: ciclón azulgrana para marcar las diferencias, evitarse cualquier sorpresa, y a vivir ante un rival liderado por el lituano Malasinskas, que jugó en el Grabollers, y por el conocido Orban, Cuando a los extremos Ariño y Gómez les dio por meter la quinta marcha, unos minutos solamente, la diferencia se estiró a los ocho tantos, rebajada a cinco porque pensará el Barça que no se debe abusar a las primeras de cambio.