Angela Hill completa el póker
Angela Hill disputa este sábado, en el UFC Las Vegas 10, su cuarta pelea de 2020. Se enfrenta a Michelle Waterson en un duelo en el que ambas llegan necesitadas.
El sábado Angela Hill se pondrá las guantillas y saldrá al octágono de la UFC. Es algo habitual para ella en 2020, ya que la del UFC Las Vegas 10 será su cuarta pelea este año. Peleó en enero, en febrero y en mayo. Ese último duelo fue una derrota, lo que la deja con la necesidad de ganar para mirar al gran objetivo de todo luchador: pelear por un título. Hill es excampeona de Invicta y su oponente tiene el mismo currículum. Michelle Waterson ganó lo mismo y su sueño es idéntico. Con 34 años Waterson y 35 Hill ambas saben que no pueden permitirse más tropiezos, sobre todo la primera, quien llega con una racha de dos derrotas consecutivas. Pese a ello, está por encima en el ranking. Es la octava por el decimotercer lugar de Hill.
Muchas similitudes, pero también diferencias. "Es increíble estar en un evento estelar, pero apesta que la razón sea por la cancelación del programado (Glover Teixeira dio positivo por coronavirus y no peleará ante Thiago Santos). Pero a parte de eso estoy muy emocionada. Estaba extasiada cuando era co-Main Event y ahora que es combate estelar estoy demasiado emocionada", apunta en una entrevista en ESPN Hill, y es que para ella será la primera vez que cierra la noche en UFC. Waterson ya lo ha hecho dos veces y la gestión de emociones puede ir a su favor.
La de Colarado llega muy confiada, pese a su mala racha. Cree que es mejor que Hill. "Su principal virtud es la fuerza que tiene en su corazón y el hambre, sobre todo viniendo de una derrota polémica. Está en un gran momento y es genial golpeando, pero creo que soy mejor en el suelo. Creo que será divierto. Si la pelea sale como espero creo que ganaré por KO y diría que en el primer o segundo asalto", apunta Waterson, quien solo ha logrado el 18% de sus triunfos por la vía del KO (el 53% han sido por sumisión". La potencia es cosa de Hill, quien ha noqueado al 45% de sus rivales, aunque Waterson tiene claro que su carencia es el suelo: nunca ganó por sumisión.
Sin duda, y aunque Waterson quiera jugar al despiste, es un duelo de estilos en el que la cabeza puede ser clave. Mala racha y experiencia por un lado, emoción y ganas de reivindicarse por el otro. La igualad es máxima, aunque por la dinámica en las últimas peleas, Hill está algo por delante. Viene en racha y muy rodada. Completará su particular póker en Las Vegas. Solo piensa en ganar.