ATLETISMO
La frustración de Lasitskene
La rusa, actual campeona mundial de altura, podría perderse los Juegos de Tokio 2020 si no se descongelan los transfers para competir a atletas de su país.
Mariya Lasitskene es la mejor saltadora de altura del mundo… y es rusa. Los escándalos de dopaje de su país hicieron que por su nacionalidad no pudiera competir en los Juegos de Río 2016. Después ganó dos oros mundiales, en Londres 2017 y Doha 2019, como atleta neutral autorizada. Pero ha vuelto a la casilla de salida. World Athletics (la Federación Internacional) ha congelado todos los ‘transfers’ de atletas rusos (incluidos los que compiten como neutrales) hasta nueva orden y no puede salir fuera de su país a saltar, con los Juegos de Tokio 2020 en el horizonte. Una situación difícil.
“Esto es lamentable, ahora incluso se nos prohíbe a competir como neutrales. Es absurdo que esto pase en el siglo XXI. Lo que está sucediendo puede influir en que me suceda de cara a los Juegos, si es que participo”, decía la ruso en una entrevista a la RT.
Lasitskene saltó el pasado sábado 2,04 en Moscú, la mejor marca mundial del año. En casa si puede competir, pero se había negado a participar este fin de semana en el trofeo de Invierno, que organiza la Federación Rusa en señal de protesta. Ha cambiado de opinión. ¿El motivo? Toda la cúpula de la Federación ha dimitido en bloque después de que el ministro de deportes del país, Oleg Matitsin, anunciara que se retiraba la acreditación al organismo. Yuriy Borzakovskiy, ilustre atleta de 800.
La situación de Rusia, que ya era altamente complicada, se recrudeció el 9 de diciembre, cuando World Athletics reveló que se había descubierto que varios miembros de la Federación habían falseado informes y pruebas del saltador de altura Daniil Lysenko. Se amenaza incluso con una suspensión más dura. La Unidad de Integridad en el atletismo recomienda directamente su expulsión y Sebastian Coe escribió al ministro avisándole de que peligraba la presencia de rusos en Tokio 2020.
“Tengo fe, entreno dándolo todo. Yo querría luchar contra mis rivales y la barra. Mi cultura siempre fue apoyar el deporte limpio”, seguía Lasitskene, con 2,07 al aire libre (el récord es 2,09) voz crítica igual que lo fue Sergey Shubenkov, plata mundial de 110 vallas, que también vive esta situación. Los Juegos de Tokio peligran para los atletas.