ATLETISMO
¿Qué pasa con las zapatillas Vaporfly? ¿Se prohibirán?
Parte de la prensa británica especula sobre una nueva normativa sobre el calzado por parte de World Athletics y un supuesto veto a las Vaporfly.
¿Serán prohibidas? ¿Si se vetan para la alta competición se seguirán fabricando? ¿Cómo afectará en el mercado? ¿Se anularán los récords? Todo son interrogantes en torno a las Nike Vaporfly que están bajo la lupa de una comisión independiente de la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics), encargada de analizar si las zapatillas ‘mágicas’ son legales y si proporcionan tantas ventajas como se habla. Son las que usan Kipchoge y Bekele, que han anunciado su enfrentamiento el 26 de abril en la maratón de Londres, pero todavía no saben con qué tipo de calzado. ¿Vaporfly Next%? ¿Las enigmáticas Alphafly? ¿Ninguna de ellas?
El debate está también abierto en la prensa británica, cercana al presidente de la Internacional, Seb Coe. Algunos medios (Daily Mail y Telegraph) se han lanzado directamente a que las zapatillas serán prohibidas y que sólo falta poner las condiciones. Y lo que es una realidad es que World Athletics sí que trabaja en una nueva reglamentación. Se especula con que el veredicto esté a final de este mes, pero también con que World Athletics podría demorar dicha resolución.
La actual norma (143.2) dice lo siguiente: “Unas zapatillas no deben estar construidas de modo que proporcionen a un atleta una ayuda o una ventaja injusta. Cualquier tipo de calzado debe estar razonablemente al alcance de todos en vista del espíritu de universalidad”. Las Vaporfly son cuestionadas por su espuma especial foam y por la placa de fibra de carbono que tiene en su interior, que podría dar un retorno de energía de un 4% según estudios independientes. También es cuestionado su drop (la diferencia de altura entre el talón y la suela) En el mercado valen 275 euros.
Con diferentes modelos de Vaporfly se han hecho los récords del mundo de maratón. Primero fue Kipchoge, con sus 2h01:39 en Berlín en 2018, que usó el primer modelo, las 4%. Brigid Kosgei este 2019 en Chicago paró el reloj en 2h14:04 con las Next%. Y el modelo que hizo saltar las alarmas fue el prototipo que usó Kipchoge en su reto 1:59 en Viena. Corrió con las denominadas Alphafly, con tres cámaras de aire y tres placas de fibra de carbono. No están comercializadas. Hizo 1h59:40 sobre 42.195 metros y, como era un reto no oficial, su gesta no puede ser anulada (recibió el premio a atleta del año de World Athletics con ello)..
Nike prefiere no pronunciarse sobre el asunto (“nosotros trabajamos en la mejora de nuestro deportistas”, es la versión oficial) y existen incluso ciertas dudas si el gigante comercial de Oregón no ganaría en popularidad en caso de que su calzado estrella, que ya revienta el mercado, fuera vetado. Más preguntas: ¿Cómo se podría controlar su uso en carreras populares, que es su mayor público?
“La controversia podría beneficiar a Nike a nivel de ventas”, dicen consultoras independientes. En cuanto a la batalla mental, ya está ganada. “Si una atleta lleva Vaporfly y otro no, ya vas 1-0”, dice una corredora que acaba de cambiar de marca. Aunque el pasado domingo, Rhonex Kipruto batió el récord mundial de 10k con unas Adidas. El debate está en la mesa y las dudas se multiplican.