Shields barre a Habazin para ser la más precoz de la historia
Claressa Shields derrotó a Ivana Habazin y así se proclamó campeona unificada WBC y WBO del superwelter. Es la púgil que menos ha tardado en reinar en tres divisiones.
Claressa Shields cumplió con su palabra. En Atlantic City realizó un combate en el que solo es posible hablar de boxeo. "Una vez pase la pelea el aplazamiento de la primera (supuestamente su hermano agredió al entrenador de su rival) será pasado", prometió. Y así es. 'T-Rex' ofreció una nueva exhibición y sumó otro récord más a su carrera. Con 24 años, la estadounidense (doble oro olímpico) tiene una candidatura muy seria para ser considerada la mejor de la historia. Este viernes derrotó a Ivana Habazin por decisión unánime (99-89, 100-90 y 100-89) y se proclamó así campeona mundial del peso superwelter por el WBC y la WBO. Así, ha logrado ser monarca en el supermedio, medio (unificando los cuatro títulos) y ahora en el superwelter. Para ello solo ha necesitado 10 combates, dos menos que Lomachenko y Tanaka, quienes más rápido habían logrado reinar en tres divisiones hasta hoy. Histórica.
El combate fue dominado por Shields de inicio a fin. Ni tan siquiera la pérdida de fuelle en los rounds finales la metió en aprietos, y es que técnicamente la estadounidense es un portento y además posee una cosa vital en el boxeo: inteligencia. Habazin salió enrabietada y en cuanto sonó la campana tiró el primer golpe. Quería sorprender, pero la defensa de Claressa es prodigiosa. Aguantó los primeros embites y después mandó ella con golpes rectos. Los dos asaltos iniciales los llevó así, después, una vez que había estudiado a su oponente, la masacró. Habazin pasaba los golpes de Shields y metía su cabeza en el pecho de la estadounidense. Dejaba mucho hueco en su zona de flotación y ahí percutió con gran dureza. Así fue sacando combinaciones más largas y la croata comenzó a flaquear. El castigo iba a más.
Shields había pronosticado que noquearía a su oponente antes del sexto asalto, y casi lo logra. El daño en la zona hepática mermó a Habazin. Un golpe arriba para hacer que la croata se arrugase y dos hooks para que fuese a la lona. Le echó arrojo Habazin, que resistió. 'T-Rex' dominaba, pero desde el séptimo asalto comenzó a notar la fatiga y dejó hacer más a su oponente. Fueron rounds menos vistosos, salvo el último, ya que la europea decidió moverse más y obligaba a Shields a lanzarse con manos sueltas. Habazin apretó en el acto final, pero la estadounidense aguantaba bien y colocaba sus golpes certeros al contragolpe. El resultado estaba claro y antes de escuchar las cartulinas, Claressa se ciñó una corona a su cabeza. Es la reina y la más precoz del boxeo con tres reinados.