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#TOCAGANARATODAS

Las deportistas llevan la ilusión a los niños del Hospital La Paz

Arderius, García, Lomba y Rodríguez acudieron a la cita impulsada por Iberdrola. La Paz es uno de los hospitales mejor valorados de España.

Madrid
Las deportistas llevan la ilusión a los niños del Hospital La Paz

Una vez más el deporte destaca por su capacidad de solidarizar y de llevar sonrisas a los menos afortunados. Un grupo de cuatro deportistas de élite visitó ayer por la mañana a los niños enfermos del Hospital La Paz, que tuvieron que pasar las fiestas ingresados. Sin embargo, pudieron empezar 2020 compartiendo regalos con iconos del deporte femenino como Silvia Arderius, recién subcampeona del mundo de balonmano; Patricia García, jugadora de rugby y diploma olímpico; Anair Lomba, exfutbolista del Valencia y embajadora de LaLiga; y Patricia Rodríguez, tetracampeona de España de boxeo (-60kg). "Lo importante es acercar el deporte a los pequeños que están en esta situación", dijo García, que participó de la iniciativa impulsada por Iberdrola por tercer año consecutivo.

Cada deportista acudió a la cita con los objetos que les acompañan en sus éxitos deportivos cada día. Los guantes de Rodríguez, el balón de rugby de García y la camiseta de la Selección española de fútbol de Lomba, entre otros regalos, terminaron en las manos de los niños, que aprendieron de ellas los fundamentos y los secretos de sus disciplinas.

Pero no fueron sólo ellos quienes se quedaron con un buen recuerdo de esta jornada, como cuenta Lomba: "Creo que tenemos mucho que aprender de ellos y de su espíritu de lucha porque al final en el deporte se lucha, aunque de otra manera. Es importante visitarlos en estas fechas porque es una época para estar en familia y ellos desgraciadamente tienen que pasarlas en el hospital porque su enfermedad no les permite salir. Hemos conocido a una niña, que se llama Ana, que nos ha dado una lección a todos porque tiene unas ganas de vivir y un conocimiento sobre su enfermedad y sobre el deporte que son dignos de admirar. Nos robó el corazón y nos partió el alma".

Algo que también comparte Arderius, que acaba de volver de Japón, donde conquistó la medalla de plata en el Mundial de balonmano. "Valores del deporte como la lucha, el sacrificio y el esfuerzo son también importantes para estos niños, pero al final acaba siendo una lección para nosotras. Desde poder jugar con ellos a ver su cara de ilusión, todo ha significado una mañana inolvidable", relata emocionada.