Rollins doma a Strowman antes de recibir un aviso de Wyatt en Clash of Champions
Seth Rollins mantuvo el Campeonato Universal ante Braun Strowman en Clash of Champions. Después fue atacado por Bray Wyatt. Kingston retuvo el título de la WWE.
Nunca antes en WWE se vivió una situación como la que se dio en el Spectrum Center de Charlotte (Carolina del Norte, Estados Unidos). Seth Rollins y Braun Strowman fueron compañeros y rivales en la misma noche. Ambos empezaron perdiendo los campeonatos por parejas de Raw ante The Revival. Hubo polémica, porque Strowman empujó a uno de sus rivales y acabó, de carambola, haciendo daño a su compañero. Sus caras dejaban claro lo difícil de la situación, pero el show debía continuar y con el Campeonato Universal en juego se volvieron a encontrar. La victoria cayó del lado del campeón (Rollins), pero su capacidad de sufrimiento fue de nuevo lo que le otorgó el triunfo. Sigue en poder del título, pero poco tardó en recibir un mensaje de su próximo oponente: Bray Wyatt. Con su nueva versión le atacó durante la celebración y le dejó claro que no podrá descansar hasta Hell in a Cell (7 de octubre).
Antes, Strowman estaba ante su gran oportunidad y no la desaprovechó. Atacó a Rollins utilizando su mayor tamaño. Múltiples choques, golpes por el ringsite y hasta una plancha tras un vuelo desde de la tercera cuerda del ‘Monstruo entre Hombres’ (no se le recordaba un movimiento similar). Lo pasó muy mal, pero como siempre, Rollins tiene muchas vidas y las fue gastando. Cuando ambos estaban tocados, Seth puso el combate de su lado a base de pisotones. Necesitó tres para rozar la cuenta final… pero Strowman no cedía. Entonces, tras evitar un Running PorwerSlam, tuvo que innovar. Un pedigree, marca de la casa de Triple H, y otro pisotón le acabaron dando la victoria. La valoró Rollins, al que se le veía radiante… pero poco le duró. La oscuridad llegó y Wyatt comenzó con la guerra psicológica. No le dio ni un segundo de descanso al campeón. Había avisado en su segmento semanal de la pelea. No puede esperar.
En cuanto al Campeonato de la WWE, Kofi Kingston logró otra demostración de su poderío. El ghanés continúa destrozando los pronósticos. Este domingo Orton, con su tradicional ritmo pausado, le castigó de todas las maneras posibles. Con un RKO parecía todo hecho, pero no fue así. El campeón demostró por qué lo es, se rehizo y con un fantástico ‘Trouble in Paradise’ logró una victoria de las que reafirman legados. No tuvo un tipo de lucha de ese estilo Roman Reigns. El ‘Big Dog’ quería vengarse… pero le fue imposible. Resistió una paliza tremenda de Rowan y cuando puso el pleito de cara apareció Luke Harper (que llevaba meses lesionado) para completar el castigo y dar el triunfo a Rowan. Reigns no lo dejará así. Mirando al resto de títulos masculinos, destaca el triunfo de AJ Styles sobre Cedric Alexander, quien perdió, pero volvió a dejar muestras de su calidad. El wrestler de Carolina del Norte está preparado para lo que la WWE quiera.
Becky Lynch se venga, sin victoria, ante Sasha Banks
Becky Lynch y Sasha Banks ofrecieron una de las mejores pleitos de la noche. Ambas son dos de las luchadoras con mayor calidad de la compañía y lo demostraron en un combate muy igualado por el Campeonato Femenino de Raw. Ambas tuvieron sus momentos, pero la que más cerca tuvo el triunfo fue Banks, con ilegalidad, eso sí. La aspirante aprovechó que el árbitro no veía su posición para atacar con una silla a Becky. La campeona se salvó, y cuando vio la silla (el referí se la había quitado a Banks), quería venganza… pero acabó noqueando al árbitro por error. Fue descalificada por acción (retiene el título), pero ninguna de las dos se enteraron hasta un rato más tarde. Mientras, utilizaron el pabellón de Charlotte como ring.
Becky dominó y castigó a Banks, pero de nuevo en el ringsite, ‘La jefa’ volvió a poner en aprietos a la campeona. Se rehizo de nuevo la irlandesa y acabó dando una tremenda paliza a Sasha hasta que los árbitros salieron del vestuario y la separaron. El resultado no dejó ganadora clara, y visto lo visto, el próximo PPV de la WWE, Hell in a Cell, parece el mejor lugar para que resuelvan sus diferencias. Mientras, por el título de SmackDown, Bayley volvió a demostrar que su actitud ha cambiado. Quitó la protección a un esquinero y se aprovechó de ello para ganar, porque Charlotte Flair le estaba dando una tremenda paliza. Tan mal se vio Bayley que se fue corriendo de la escena. Por último, en el título femenino por parejas, Alexa Bliss y Nikki Cross retuvieron los cinturones ante Sonya Deville y Mandy Rose en otra exhibición de Cross.