El Barcelona no se expuso en exceso ante el duro Ademar

El Barcelona se aseguró la final de la Copa Asobal en un partido tranquilo, en el que vivió en una zona de confort conseguida pronto, en el inicio del partido, y con esa renta de cinco goles puedo encarar el choque sin excesivo desgaste ante un rival como el Ademar que casi ha jugado los mismos partidos que los azulgrana, con una plantilla inferior, y con lesionados. El 28-21 (15-10) definitivo fue más o menos las diferencias que se vieron en el partido, entre un equipo que se veía ganador, y otro que luchaba más que por ganar, por mostrar su talante de no entregarse jamás; al menos eso perdura con el paso de los años.

Ganó el Barça, como se esperaba; sin excesivo sufrimiento y sin exponerse, con Duarte en racha, porque el portugués lleva un mes de diciembre con mucha aportación ofensiva. Como si el equipo azulgrana tampoco quisiese más desgaste del necesario ante el partido de la final (19:00, Esport3) ante el Bidasoa, en el Pabellón Barris Nord de Lleuda, en el que puede lograr su octava Copa Asobal consecutiva, el que sería una racha de 23 títulos nacionales, entre Supercopa, Liga, Copa Asobal y Copa del Rey; la racha empezó tras ceder la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid, en mayo de 2013; ese año ganó la Liga, y empezó la serie ininterrumpida.

El Bidasoa, el único equipo de los cuatro de la Copa Asobal que no ha estado en las competiciones europeas, lleva en sus piernas 13 partidos menos que los barcelonistas, pero le faltan jugadores, como Rodrigo Salinas, por ejemplo; y otros siguen entre algodones, como Odriozola, quizá el único jugador de los irundarras que podría actuar en el Barcelona sin desmerecer.