Rocky Fielding, el 'campeón por sorpresa' que desafía a Canelo
El británico, campeón mundial (interino) WBA del supermedio, expone este sábado su cinturón ante el mexicano. Llega como tapado y muy por debajo en las apuestas.
El sábado Saúl 'Canelo' Álvarez (50-1-2, 34 KO) debuta en uno de los templos del boxeo, el Madison Square Garden de Nueva York. Para esa cita ha querido buscar se un nuevo reto: pelear en el peso supermedio. Para ello se ha buscado un campeón, Rocky Fielding (27-1, 15 KO). El británico es campeón mundial WBA Regular (uno de los interinatos del organismo), no es el título absoluto, pero al mexicano no le ha importado y subirá de peso sólo por una pelea (sigue siendo campeón WBA y WBC del medio). Canelo es muy favorito en las apuestas, nadie cuenta con Fielding... pero ese papel es habitual para el púgil de Liverpool.
Cuando alzó el WBA Regular también iba muy por detrás en las apuestas, pero noqueó a Tyron Zeuge en Alemania en el quinto asalto pese a haber aceptado la pelea con un mes de antelación. Es su historia. Fielding es un boxeador de la vieja escuela. No hace provocaciones, ni tiene un gran séquito. Sólo se centra en boxear y cumplir su sueño. Además, sabe lo que es aguantar los reveses del destino. Su única derrota como profesional le llegó en 2015 ante Callum Smith (actual campeón de las WBSS), intercambió golpes y cayó noqueado en el primer asalto. Aunque al día siguiente descubrió que el deporte no deja de ser un juego. Su madre le reveló que tenía cáncer y se dedicó a su cuidado. A su vez preparó su regreso al ring, pero no no quería un paso atrás y tuvo rivales difícil desde el primer momento.
Ganó al excampeón continental Rebrasse y después logró ganar el título británico, el cual defendió en septiembre de 2017, pero de nuevo el destino le volvió a golpear. Tuvo que dejar al entrenador con el que debutó en 2010, Oliver Harrison, ya que padecía cáncer. Fielding tuvo que seguir y se puso a las órdenes de Jamie Moore, que tiene su gimnasio en Manchester. Desde ese día, viaja a diario desde Liverpool a esa ciudad (90 kg) para entrenar. Con su nueva esquina ganó el cinturón que posee y le ha abierto las puertas al combate más importante de su carrera.
Fielding sabe lo que es caerse y levantarse, pero sobre todo es experto en remontar situaciones adversas. Su mayor ventaja este sábado será la envergadura. Tiene 12 centímetros más de altura, debe jugar con ello e intentar mantener lejos al mexicano, aunque ha demostrado que tiene la suficiente técnica para fajarse y castigarle abajo. Lo tiene difícil, pero Fielding ya ha ganado con este combate y va a por todo.