Usyk es el rey: noqueó a Bellew
Solventó por KO en el octavo asalto una pelea muy igualada. Bellew salió a arriesgar e hizo un gran papel. Retuvo los Mundiales WBC, WBA, IBF y WBO del crucero.
Lloraba Bellew en su esquina tras ser noqueado por Olek Usyk en el octavo asalto de su combate. El británico anunciaba después que era el final de su carrera y se rendía al ucraniano. "Es mejor que yo. Sólo puedo reconocer su calidad", apuntaba tras su derrota. Usyk, por su parte, le reconoció su valía. Acaba de retener los cuatro cinturones del peso crucero (WBC, WBA, IBF y WBO) y demostraba su condición de monarca de la categoría. Fue una pelea difícil que solventó con nota y apuntó al rey de reyes: Anthony Joshua. El peso pesado y el británico son su próximo objetivo. Usyk quiere más.
Usyk y Bellew se repartieron el reconocimiento tras el pleito de manera justa. Los dos trazaron una estrategia y se ciñeron a ella. El británico complicó a un hombre que parecía inexpugnable, pero para hacerlo arriesgó y con un hombre con tanta dinamita en las manos lo pagó. Bellew salió a moverse, haciendo fallar a Usyk y contragolpeando con la derecha recta. Un golpe durísimo que catapultaba en las cuerdas. El campeón le cerraba ahí, pero el ensogado era el lugar en el que el aspirante parecía más cómodo. Usyk metía más ritmo, pero estaba incómodo, muy incómodo, pero fue un témpano.
Bellew utilizó la evasiva. Salía muy escorado y dejaba sin capacidad de golpeo a Usyk, que no pudo aprovechar su virtuosidad con los pasos en diagonal. El público no se ponía de acuerdo en el pabellón, las redes sociales eran un hervidero... la pelea estaba más que igualada. Usyk llevaba la iniciativa, pero no estaba cómodo y recibía contras. Aun así, cada vez que plantaba su mano sobre el rostro de Bellew lo hacía con mucho peligro y ahí estuvo la clave de su éxito.
El campeón tenía claro que la pelea se iba a hacer larga y la rapidez de Bellew en algún momento desaparecería. Por ello, pese a que las cartulinas iban muy ajustadas no se puso nervioso y siguió con su plan hasta que en el octavo asalto Bellew falló. El británico salía de espaldas algunas veces y otras escorado, se había salvado varias veces, pero una izquierda entró en su rostro. No fue clara, pero Usyk vio que debía atacar. Cruzaron golpes unos segundos más tarde, con la ventaja para el campeón. Se tambaleó Bellew y fue su fin. Jab durísimo de Usyk que bajó la mano derecha de Bellew y un crochet tumbó al excampeón. El plan fue perfecto, pero el riesgo tenía un precio... y lo pagó. Gran combate de ambos, pero con final diferente. Bellew mira a la mida sin subirse al ring y Usyk fantasea con cruzarse en él con Joshua. Una misma pelea y dos finales. El boxeo.