Niko: "Este será siempre el gran día de mi vida"

-Llegaba usted entre los favoritos a la medalla de oro. de hecho ocupaba antes del Mundial el tercer puesto en el ranking mundial, con la medalla de bronce en el Europeo de este año.

-Los resultados que había obtenido eran buenos, siempre con medallas o cuartos puestos. Y sí, la verdad es que mis dos objetivos de la temporada eran el Europeo y el Mundial. Pero el Mundial es otra cosa, por lo que representa, por los competidores. Es otra dimensión. Y sí, los números eran buenos, pero luego hay que venir, competir y ver dónde llegas. Y bueno, medalla de oro. Increíble. ¡Que día! Siempre será el gran día de mi vida.

-Su entrenador, Quino Ruiz, no ha podido contenerse y no paraba de llorar.

-Ya, ya. Yo he tenido que permanecer serio para que no pareciese un funeral. Ya llegará el momento de llorar de alegría. Ufff, campeón mundial. Esto es muy grande.

-¿Cuándo ha visto que podía ganar?

-Hasta el final. No no, no ha sido fácil. El cubano me ha marcado a mi antes, y he tenido que remontar porque no tenía mucho tiempo, y vamos, que he ido a contrarreloj. Luego ya es otra historia, sin relajarse, porque en una final no puedes hacerlo, pero era diferente. Y en la acción de oro le he vuelto a atacar, con la misma técnica que cuando me marcó él, y también ha vuelto a repetir el contraataque, pero como lo esperaba, ya estaba preparado para aguantarle y lanzarle. Me ha salido bien.

-¿Qué le ha dicho?

-Él a mi nada. Yo sí, que había sido un buen combate en una gran final. Creo que se irá contento de Bakú, porque es de mi edad, los dos tenemos 22 años, y es muy importante de cara a nuestro objetivo de estar en los Juegos Olímpicos de Tokio. Tenemos dos años por delante para prepararlos, y hay que hacerlo a conciencia.

-Dicen que usted es un buen relaciones públicas, que se lleva muy bien con todos los rivales.

-Hablo georgiano, ruso, español e inglés. Vamos, que no tengo problemas de comunicación. Nos conocemos todos porque competimos durante todo el año, y al Mundial todos llegamos con las mejores expectativas, todos queremos ganar, y sólo gana uno. ¡Y he sido yo! ¡¿Qué grande no?!

-Vino a España con sus padres y ahora está solo en Madrid, porque su hermano también ha regresado a Georgia.

-Sí, él quería jugar al fútbol, pero ha tenido varias lesiones en el tobillo, le han operado, y ha perdido interés. Ha preferido volver a los estudios, en Georgia en vez de en España. Pero no estoy solo. Cuando no tengo viajes ni concentraciones mi madre viene a Brunete para estar conmigo. Es la que ayuda. Y a Bakú han venido todos, la familia al completo.

-¿Hay algo más que judo en su vida?

-En este momento no. Me dedico al judo casi de manera profesional, y mis aspiración es que en breve pueda traer a España a mis padres y a mi hermano. Y claro, también preparar los Juegos Olímpicos, que es la cita más importante para un deportista.