El Mundial, el mejor test para el surf español rumbo a Tokio 2020
El sábado comienza en Tahara (Japón) el Mundial de Surf. La Federación Española de surfing, cuenta con el apoyo de Iberdrola.
EI año pasado, en el Mundial de Francia, España logró una medalla de bronce histórica que Carlos García Gómez, presidente de la Federación Española de surfing, asegura que “se va a defender con uñas y dientes en Japón”, donde el sábado se inicia el Campeonato del Mundo en las aguas de Tahara, una pequeña ciudad nipona célebre internacionalmente por ser una de las sedes de Toyota... y por tener algunas de las mejores olas del país.
Este Mundial aún no puntúa para la clasificación olímpica, “pero es un test para la Selección”, ilusionada con que el deporte haya sido merecedor de la consideración olímpica para Tokio 2020. “Para nosotros ha sido importante, porque antes no existíamos. Ahora tenemos más visibilidad, y al menos cuando llamas te cogen el teléfono”, asegura García Gómez, encantando con el apoyo de Iberdrola, que ha unido al surf a las 15 federaciones a las que patrocina.
“Desde hace un mes tenemos un acuerdo con Iberdrola, y después del Mundial patrocinará nuestra competición nacional, en el otoño”, informa el presidente de la Federación Española, que sabe que es una buena época para el surf nacional: “El agua no está tan fría para estos chicos y chicas que llevan desde los siete años en el agua”.
Al Mundial el equipo español envía un equipo de seis deportistas, tres hombres (Gony Zubizarreta, Vicente Romero y Andy Criere) y tres mujeres (Garazi Sánchez, Leticia Canales y Nadia Erostarbe), con expectativas de hacer un buen torneo tras los resultados obtenidos en los Campeonatos de Europa.
Los internacionales saben lo duro que será conseguir una plaza para los Juegos Olímpicos, porque el COI ya ha anunciado que sólo habrá 20 competidores, masculinos y femeninos, con un máximo de dos por país. Y por eso en 2019 comenzará la lucha por los puntos en el ránking de la Federación Internacional.
García Gómez recuerda que el surf “llegó a España de la mano de los franceses” que veraneaban fundamentalmente en el Cantábrico y Canarias. Y se quedó para siempre, aunque “aún es un deporte humilde en el número de participantes”, y porque si bien España dispone de casi 6.000 kilómetros de costas “las del Mediterráneo no valen para el alto nivel”.
Este Mundial es con ola estándar, porque hasta ahora las olas gigantes no están contempladas dentro de la Federación, aunque todo indica que podría ser otra modalidad organizada para el futuro: “Ese tipo de ola (la ola de la vaca) se da en unas condiciones determinadas, pero los deportistas saben cuándo es el momento, y con tres días de antelación se puede estar en el lugar del cameponato”.
Esa posibilidad de ampliar en el futuro tal vez pueda llegar con la colaboración con Iberdrola, aunque por el momento todos están pendientes “de hacer un buen Mundial”.