Croacia tumba a los Hispanos en una vibrante prórroga (29-31)

En un partido emocionante y jugado al límite, en el que España remó a contracorriente 53 minutos, la Selección masculina no logró finalmente clasificarse para disputar el domingo la final de los Juegos Mediterráneos de Tarragona 2018. Peleará por el bronce ante Turquía. Una agonía que duró 60 minutos (27-27) y una prórroga, con un penalti fallado por Aleix Gómez a falta de un minuto y que mantenía la ventaja croata (29-30), que finalmente sentenció el encuentro y lo celebró cómo si se tratase ya del oro (29-31).

Siempre estuvo Croacia un punto por encima en el primer periodo. De la mano de Jaganjac, autor de cinco goles los primeros 30 minutos, los balcánicos machacaron la portería española y cogieron una ventaja de un gol que fueron manteniendo al menos hasta el 9-11, cuando el partido se rompió. España fue haciendo la goma y encontró a Ariño como su mejor atacante, autor también de cinco goles con su martillo.

Con 9-11, en un minuto de locura, dos contraataques croatas desligaron el encuentro. Se pasó del 9-11 al 9-13, una montaña para el equipo español, que, pese a los esfuerzos, no podía detener a su rival. Se llegó al descanso con un 12-15 revelador. La intensidad defensiva croata también fue superior a la española, que necesitaba cambiar su manera de jugar para desbloquear el encuentro.

Y Jordi Ribera se dio cuenta tras el descanso. Su equipo no tenía nada que hacer si seguía así. España aumentó el ritmo atrás, Sergey Hernández empezó a detener lanzamientos y Goñi y Ariño empataron (18-18). Pero le costó a los españoles ponerse por delante, de hecho no lo hizo por primera vez hasta el minuto 53, gracias a un gol de Ángel Fernández, que jugó en el avanzado en fase defensiva (25-24). Los Hispanos lograron darle la vuelta debido al papel de sus extremos, autores de la mitad de los goles de su equipo, y a la pérdida de claridad croata en ataque. El encuentro alcanzaba su fase culminante con todo por decidir y una igualdad máxima.

Croacia tuvo en Jaganjac, de 20 años y que juega en el Metalurg macedonio, su estrella. Jugó los últimos ataques arriesgando todos los lanzamientos, participando solo en fase ofensiva, y suyos fueron los goles que llevaron la igualdad al último minuto (27-27). Pero Jaganjac falló el ataque croata ante la amenaza de pasivo y España dispuso de la última posesión. Y Adrián Figueras marcó, pero fuera de tiempo. El partido, abocado a la prórroga. España tuvo su oportunidad, pero la perdió en ese gol fuera de tiempo por apenas un segundo. Un segundo que fue la diferencia entre jugar por el oro y por el bronce.