Saint Preux quiere recuperar en Saitama el lustre perdido

Los dos últimos años no han sido buenos para Ovince Saint Preux. El estadounidense acumula en ese periodo siete combates en la UFC y sólo ha conseguido tres victorias. El dato es más preocupante si se mira sus últimos cuatro pleitos, sumando tres derrotas (de manera consecutiva). Está en una situación límite si quiere aspirar a algo en la división de los semipesados, pero sabe que camina sobre el alambre. 

Saint Preux salvó el primer Match Ball en abril. Ganó por sumisión y consiguió otra oportunidad, la obtuvo y volvió a ser cabeza de cartel. El estadounidense tenía cerrado un combate ante Shogun Rua, que podría haberle introducido entre los cinco mejores de su peso... una lesión le dejó sin rival a poco más de una semana para su combate. La UFC reaccionó pronto y volvió a contar con Yushin Okami. La compañía viaja esta semana a Japón y un luchador local daría lustre.

Okami estuvo siete años en la compañía, saliendo en 2013 y con un balance de 7-2 en su tiempo fuera de la compañía. El veterano japonés, de 36 años, no dudó en aceptar la oferta y buscar un último sueño en la compañía. La pelea no será más fácil para Saint Preux, que además sabe que cada combate puede ser el último. El estadounidense destaca por sobre todo por su pegada (le ha dado el 50% de sus victorias), pero ha dejado claro que se maneja también con precisión en el suelo. Por su parte, Okami tiene en la intensidad y el trabajo constante su mayor activo. Sabe contrarrestar las virtudes de sus rivales para complicarlos. Atractivo combate con dos experimentados que quieren una última oportunidad de reinar.