AS 50 ANIVERSARIO | HOMENAJE A LOS OLÍMPICOS ESPAÑOLES
Demetrio Lozano: “Es un orgullo tener tres bronces españoles”
Es el único jugador que tiene los tres bronces olímpicos de la Selección de balonmano. Demetrio Lozano (1975) fue un protagonista inesperado en Atlanta y esperaba más en Pekín.
En su época de jugador, llevarle a la Selección era un seguro de éxito: tiene casi todas las medallas que ha ganado España en doce años.
Es un orgullo para mí, sobre todo, haber participado en las tres medallas olímpicas que ha ganado España en su historia. Han sido de bronce, pero tienen un gran valor.
La primera, en Atlanta.
Yo era un chavalín de veinte años, un debutante en un grupo donde había grandes jugadores. Y claro, apenas jugaba. Pero el caso es que en la lucha por el bronce contra Francia, Juan de Dios no convocó a Mateo Garralda, que andaba con molestias, y Urdangarín era nuestro único lateral derecho. Pues bien, en una lucha por un balón le sacaron roja directa y nos quedamos sin zurdos, y ahí entré yo, en un momento complicado, porque ganábamos a los campeones del mundo, pero con miedo. El caso es que entré, que le eché cara y que los franceses esperaban a que fallase. Les metí cuatro de los últimos seis goles y ganamos el bronce.
Luego, Sydney.
En aquellos Juegos se despedía Urdangarín, y nosotros nos convertimos en importantes, con una corte de periodistas que nos seguían. Teníamos un gran equipo, con Dujsebaev y Urios en ataque, y luego mucho músculo en defensa. Nos eliminó en semifinales Suecia, con su mejor generación, pero no ganó el oro (lo hizo Rusia), y nosotros ganamos el bronce a Serbia: conocíamos a todos sus jugadores, que militaban aquí. Aquel año no tuvimos vacaciones: volvimos, y a jugar la Liga.
Da la impresión que la tercera medalla, el bronce de Pekín, en 2008, se quedó corto para las expectativas.
Ganar el bronce es importante; no creo que sea un premio menor, aunque con la perspectiva del tiempo sí se puede decir que nos supo a poco, porque aquella generación se merecía la final olímpica, tras ser campeona del Mundo en 2005 y subcampeona de Europa en 2006.
Además, ustedes siempre ganaban a Islandia.
Aquel año habíamos jugado cinco amistosos con ellos y los cinco los ganamos. Nosotros teníamos una defensa 5-1 que practicaba Juan Carlos Pastor que se le atragantaba a todos los equipos. Pero fue nuestro peor partido, que coincidió con el mejor de Olafur Stefansson, que lideró a Islandia para superar a nuestra defensa, y nos vinimos abajo. Luego ganamos el bronce ante Croacia, y tiene mérito, porque reaccionamos en un día para conseguir esa nueva medalla, aquel equipo fue medallista por primera vez sin nacionalizados.
¿Y ahora?
Pues me gusta seguir vinculado al balonmano desde mi trabajo en la Universidad San Jorge de Zaragoza. Es un momento de pausa en mi carrera, y de poder disfrutar de los fines de semana al fin.