La NFL baja un 8% en las audiencias de televisión en 2016
La temporada regular recién terminada ha visto el fin de los crecimientos de los últimos años, aunque la clave parece ser extradeportiva.
La NFL es un producto soberbio, que consigue aumentar en prácticamente todas las parcelas y que le permite ser la liga organizada con más impacto a nivel planetario. Da igual el tema que se aborde, el football profesional en Estados Unidos goza de un robusto estado de salud y no para de crecer y crecer hasta el infinito y más allá.
Excepto en los ratings televisivos en 2016, claro.
Con la temporada regular ya finalizada, las distintas cadenas de televisión han publicado los datos y la conclusión que se puede sacar es que la NFL en lugar de crecer, ha experimentado una regresión que no se veía casi desde la era en la que los dinosaurios dominaban la Tierra… o a lo mejor no hay que remontarnos tan lejos, aunque resulta extraño después de tantas modificaciones al alza.
En líneas generales, el descenso experimentado es de 1.4 millones menos por encuentro de media, pasando de 17.9 a 16.5.
Curiosamente han sido los partidos en prime time, con esos huecos de especial trascendencia histórica los que más han sufrido, con un declive del 12% en los 17 partidos del Monday Night Football de la ESPN y un 10% en los 19 del Sunday Night Football de la NBC.
Fox no ha sufrido tanto la falta de interés de los aficionados, bajando sólo un 6% en sus encuentros diurnos mientras que la CBS tuvo un 7%.
De todas formas, la conclusión a la que llegan las mentes pensantes o, en su defecto, el comisionado Roger Goodell es que la carrera presidencial entre Donald Trump y Hillary Clinton afectó a esos ratings, experimentándose un retroceso del 14% durante las ocho semanas en las que las dos ‘competiciones’ coincidieron en el calendario.
Una vez que Trump ganó las elecciones, las cosas mejoraron significativamente y la variación respecto a los datos de 2015 fue de un 1%, esto es, prácticamente nada.
El punto de inflexión de este cambio de tendencia a la baja fue el duelo en Acción de Gracias entre los Dallas Cowboys y los Washington Redskins, con el estreno de los texanos en horario de prime time en una racha de cuatro semanas consecutivas.
Ese partido atrajo la atención de 35.7 millones de espectadores, lo que supone que fue el partido más visto en época de temporada regular desde la campaña de 1995.
Por último, señalar que la NFL ha buscado ‘agilizar’ los encuentros moviendo los bloques publicitarios para hacer más ameno su visionado tanto en casa como en el propio estadio, pero no se han hecho públicos los resultados de este experimento hasta el momento.