"Inscribiré mi nombre entre los más importantes del triple salto"

Yulimar Rojas está exultante. A sus 21 años ha fichado por el FC Barcelona, el club que seguía de pequeña, para progresar en su disciplina atlética, el triple salto. Rojas se mostró "muy feliz y contenta por esta nueva etapa en mi vida, por firmar por el mejor club del mundo". Ya es subcampeona olímpica y campeona del mundo, pero sus objetivos están claros: "Desde el momento en que acabó Río (se colgó la medalla de plata) ya estaba pensando en Tokio. Vamos por el buen camino, el objetivo es colgarme el oro", aseguró. Pese a que aún le queda mucho camino por recorrer hasta los próximo Juegos Olímpicos, tampoco es corto el que ya ha recorrido: "Desde pequeña se me dio bien el deporte. Mi padre me encontró una escuela en al que podía compaginar el deporte con los estudios y me fui de cabeza. Me interesaba el voleibol, pero cuando llegué allá los entrenadores eran todos de atletismo". Así empezó una prometedora carrera que le ha llevado a ser una de las atletas con más proyección de su país.

Pero el cambio más importante de su carrera ha sido, sin duda, el empezar a trabajar con Iván Pedroso. Rojas estaba tan decidida a trabajar con él que puso todo de su parte par conseguirlo: "Iván es una persona en al que siempre me había fijado y quería entrenar con él. Le contacté por Facebook y convencí a mi federación para que me dejaran trabajar con él". El atleta cubano, uno de los máximos referentes en el salto de longitud durante la década de los 90', está encantado de trabajar con Rojas: "Es una atleta con un enorme talento y mucha inteligencia. Mide 1'92 y para su estatura es igual de móvil que las atletas con menor estatura. Eso le da mucha ventaja", comentó el entrenador que la ve "en el camino" de convertirse en una futura campeona olímpica. El objetivo, es mutuo: En poco tiempo inscribiré mi nombre entre los más importantes del triple salto".