Josh Gordon ofrece un anticipo de lo que está por venir
El jugador de los Browns fue el objetivo preferido de Robert Griffin III y no se le vió oxidado tras perderse gran parte de los últimos dos años por sanción.
El encuentro que disputaron anoche Cleveland Browns y Tampa Bay Buccaneers tenía un significado muy especial para un joven wide receiver de 25 años de edad, llamado Josh Gordon, puesto que se trataba de su primer partido, que no oficial, desde el que disputó el 21 de diciembre de 2014, el penúltimo encuentro de aquella campaña.
Después de perderse el último de aquella temporada y todo el 2015, difícilmente se podía encontrar a alguien más feliz que el controvertido receptor de los Cleveland Browns, que fue un espectáculo por sí mismo tras una prodigiosa actuación y por la potencial asociación que puede forjar con Robert Griffin III.
Gordon atrapó un par de pases de RGIII para 87 yardas, incluido un touchdown de 43 en el que se quitó de encima al cornerback que le estaba cubriendo.
Desde este otro punto de vista, la jugada resulta incluso más impresionante.
No está nada mal para alguien que se había perdido 27 de los últimos 32 encuentros disputados por los Cleveland Browns.
Los dos productos de Baylor habían llegado a combinar en otro pase profundo de Robert Griffin III, en una jugada de tercera y ocho, que sólo nos preparaba para lo que está por venir y es que el presente (y el futuro) de los Browns pasa por la conexión que pueda realizarse entre los dos, que apenas pudieron coincidir juntos en la citada universidad antes de que los problemas de Gordon le hicieran buscarse la vida en Utah, no llegando siquiera a debutar.
Después de ver la actuación de Gordon en la derrota por 30-13 contra los Bucs, Griffin mostraba una sonrisa de oreja a oreja y afirmaba que “era divertido poder lanzar a cualquiera de estos chicos cuando hacen jugadas como esas”.
“Es bueno ver (a Gordon) completando acciones. Tiene la oportunidad de volver a la liga y esperamos sacar el máximo partido a ello”, decía RGIII tras el partido.
Por su parte, el quarterback tuvo otra actuación destacada, completando 8 de los 14 pases intentados para 119 yardas y el touchdown de Gordon, con el que consiguió esos magníficos resultados, aunque también perdió un fumble y fue víctima de cinco sacks.
Aunque únicamente se trata de un par de pinceladas, la actuación de Gordon fue de la del estilo a la que nos acostumbró en 2013, cuando atrapó 87 pases para 1646 yardas (18.9 de media) y 9 touchdowns antes de caer en esa espiral autodestructiva que casi le ha costado su carrera en la NFL antes de que le levantaran la sanción para la actual, aunque tendrá que perderse los cuatro primeros encuentros de la misma.
Con Gordon y Robert Griffin III, los aficionados de los Browns (y del resto de la NFL), ya tienen la excusa perfecta para no perderse lo que pueda pasar en Cleveland.