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LOS ANGELES RAMS

Un jugador de los Rams cree en sirenas pero no en dinosaurios

Hard Knocks nos ha dejado, esta semana, un par de momentos de absoluta genialidad por parte de los jugadores de Los Angeles.

Madrid
Un jugador de los Rams cree en sirenas pero no en dinosaurios

Hard Knocks, la serie documental sobre la pretemporada de un equipo NFL, en esta edición 2016 Los Angeles Rams, nos ha dejado algunos momentos monumentales, impagables, y me han regalado uno de los mejores titulares de mi carrera. Casi me tengo que sujetar la quijada para escribir lo que sigue.

Resulta que William Hayes, defensive end del equipo, está muy contento con el traslado de la franquicia desde Saint Louis hasta Los Angeles. El motivo no es que se vaya a vivir a una gran urbe, que le guste Hollywood, que se pueda hacer fan de los Lakers o que la vida nocturna sea un 'puntín' superior en su nueva ubicación. No. El motivo es bastante más profundo: así tiene más oportunidades de ver sirenas.

Sí.

Sirenas.

Hayes explica, con convencimiento, que cree en la existencia de sirenas y que, como todo el mundo sabe, éstas no viven en el río Mississippi sino en los océanos, verbi gracia, el Pacífico, que baña California y Los Angeles.

Es difícil discutirle la lógica de su pensamiento, así que nos sumamos a su excitación por la posibilidad de encontrarse con una sirena en el futuro cercano.

Además, Hayes es un hombre que no se cree las cosas sólo porque se las cuenten. No es de esos que asume a pies juntillas las verdades manipuladas de los científicos y los gobiernos. Nada de eso. Es una mente crítica que pone en cuestión todo cuanto damos por supuesto los más legos. Como, por ejemplo, la existencia de los dinosaurios, "no me puedo creer que por aquí hubiesen caminado T-Rexs, algo que ningún humano ha visto nunca", añadió insistiendo en que los dinosaurios no existieron.

Inapelable. En ambos casos. A la vez.

No obstante, no sólo William Hayes se mostró como un tipo con personalidad. El mismo Jared Goff, QB número uno del draft, se vio explicando que no tenía ni idea de por dónde salía el sol y, por lo tanto, tampoco se aventuraba a predecir porque lado se pondría. Pharoh Cooper, su compañero rookie, le ayudó al ser preguntado si tenía alguna idea al respecto de este intrincado misterio; fue conciso: "el sol sale por el cielo". Goff no quiso dejar el tema a medias y remató: "pues sale por el Este. Al parecer es algo que sabe todo el mundo".

Espero el próximo capítulo de Hard Knocks con sincera expectación.