Salazar y Marrero le toman la medida a las gemelas Alayeto
Se impusieron en la final del Open de Las Rozas, del World Pádel Tour. En la masculina: Bela y Lima no le dieron respiro a Navarro y Sanyo (2-0).
El Open de Las Rozas no acabó con sorpresas, porque en mujeres ganó la pareja emergente y número dos del ránking, Alejandra Salazar y Marta Marrero, y en hombres los número uno, Belasteguín y Lima. Lo que supone que en mujeres se estrecha la diferencia de las gemelas Sánchez Alayeto con sus perseguidoras, y en la categoría masculina la brecha se mantiene aunque Paquito Navarro y Sanyo mantienen con más fuerza la segunda posición.
Alejandra y Marta ganaron el segundo torneo de los tres disputados hasta la fecha, y las Gemelas perdieron su segunda final y siguen sin levantar un trofeo. El partido consumió los tres sets, con un 6-1 final que en realidad dice bien poco de lo que ocurrió en la Plaza de Toros roceña, porque las cuatro jugadoras brindaron un pulso tremendo y espectacular de casi dos horas y medio.
De las cuatro, sólo Alejandra es de origen “padelero”, y se nota en sus golpes más de este juego que contrasta con el paderío de su compañera y de las hermanas, las tres procedentes del tenis. Salazar no tiene la fuerza de ninguna de las tres, pero dispone de otras destrezas que le convierten en el complemento ideal de Marta, y, además, esta pareja ha llegado a esa madurez de no perder los nervios, de esperar sus rachas, de controlar las emociones.
Las Gemelas tal vez jugaron el último set con la ansiedad de ganar, porque son las nùmeros uno, parecían poco menos que inabordables, y empiezan a encontar oposición. En este encuentro, tras empatar el choque a uno, y mostrar una cara emergente, la pérdida del saque en el primer juego de la tercera manga provocó que les entrase las primas y arreciasen las dudas. El 6-1 no hace justicia al buen encuentro que brindaron las dos parejas, con puntos espectaculares, con ataques, con contraataques, con un derroche de esfuerzo por ambas partes, pero también es cierto que las ganadoras de Valencia tuvieron una mayor fortaleza mental para ganar otra vez, como si le hubiesen tomado la medida a Mapi y a Majo.
En la final masculina, con el 2-0 en poco más de una hora (6-1 y 6-2), Pablo Lima fue el hombre del partido para mejorar a Belasteguín, porque si es cierto que Fernando demostró con muchas acciones su condición de hegemónico mundial, también tuvo errores que a él le son impropios.
No fue el día del genial Navarro, a quien Bela le sacó del partido devolviéndole con punto directo defensas a sus remates que para otros serían incontestable. Sanyo intentó mantener a la pareja, pero esa dulpa necesita del derroche de genialidad del sevillano para estar en lo más alto. Curioso: la mayor ovación de la jornada se la llevó Navarro ya en el final del partido, tras defender cuatro bolas por toda la pista, y buscar la quinta fuera de la jaula, que se le fue fuera por poco.