Jake Arrieta no es capaz de igualar a Johnny Vander Meer
El pitcher de Chicago Cubs no es capaz de seguir a Vander Meer, que lanzó dos no-hitters seguidos allá por 1938 y sigue siendo el único en hacerlo.
No nos vayamos a engañar. El mayor aliciente en la jornada del jueves no era otra cosa salvo ver si el soberbio Jake Arrieta iba a ser capaz de completar la utopía e igualar la marca de Johnny Vander Meer, que lanzó no-hitters, encuentros completos en los que no permitió ningún hit a sus rivales, allá por 1938. Y aunque sabíamos era altamente improbable, la duda quedó rápidamente resuelta.
Detroit Tigers-Oakland Athletics (7-3)
Anthony Gose no había conseguido un home run desde la jornada inaugural y volvió a esa tradición, apoyando la salida de Anibal Sánchez con su segundo de la campaña y con un doble. Buenas noticias para los Tigers con el bate de Miguel Cabrera que continúa con su calentamiento y un Anibal Sánchez que sigue luchando para mejorar su mecánica de lanzamiento, y de paso, su efectividad.
Chicago Cubs-Milwaukee Brewers (7-2)
No tuvimos que esperar mucho. El primer bateador de los Brewers, Jonathan Villar, evitó que pudiéramos asistir a otra entrega histórica del serial Arrieta, y partió el bate en el proceso de lograr el primer hit de su equipo. No fue la mejor actuación de Arrieta, algo errático para su estándar habitual, pero los Cubs ganaron por 18ª ocasión consecutiva cuando está sobre el montículo. El gran número de lanzamientos impidió que pudiese tener una actuación de calidad, dejando su racha en 24 encuentros seguidos, a dos del récord de Bob Gibson entre 1967 y 1968, aparte de terminar el número de entradas seguidas en casa sin permitir anotaciones en 52 entradas y dos tercios.
Washington Nationals-Philadelphia Phillies (0-3)
Cameron Rupp y los Phillies detuvieron en seco a los Nationals en su propio estadio, y no sólo por cómo abrió la lata frente a Jonathan Papelbon, sino como han barrido del mapa a los capitalinos que empezaron 14-4 su año y cuyo récord todavía es un más que notable 14-7. El ataque se está mostrando inoperante más allá de Harper y eso debe cambiar.
Baltimore Orioles-Chicago White Sox (10-2)
Manny Machado celebró su intención de jugar con la República Dominicana el próximo año en el World Baseball Classic con un grand slam y cinco carreras impulsadas, para convertir a los Orioles en el mejor equipo en casa con una marca de 8-1 y frenar en seco a unos White Sox que venían lanzados con seis triunfos consecutivos. No está mal para acabar con su sequía personal que llegaba a los 17 turnos de bateo sin hits.
Boston Red Sox-Atlanta Braves (3-5)
Clay Buccholz no tuvo su mejor salida y el hecho de hacerlo frente al peor equipo de la competición no es muy esperanzador para afianzarse en el segundo puesto de la rotación de los Sox. Markakis lideró la carga de Atlanta, que frenó su deriva tras ocho derrotas consecutivas y Freddie Freeman continúa su salida desde el pozo en el que se encontraba.
Arizona Diamondbacks-St. Louis Cardinals (3-0)
Rubby De la Rosa no fue rival para unos Cardinals que habían flexionado los músculos de manera soberbia en la serie en el Chase Field y les maniató a lo largo de siete entradas, con diez strikeouts como nueva mejor marca personal. Michael Wacha estuvo sobresaliente excepto por los errores en los dos home runs concedidos.
Los Ángeles Dodgers-Miami Marlins (3-5)
Don Mattingly completó su regreso triunfal a Los Ángeles con la pega de hacerlo dirigiendo a los Marlins. Kenta Maeda no fue ningún enigma para los bateadores de Miami, con home runs de Stanton y Realmuto. El bajón llegaría nada más acabar el partido con el anuncio de la sanción de 80 partidos por dopaje de Dee Gordon.