Adam LaRoche pone a la familia primero y dice adiós

Nadie le va a decir a Adam LaRoche cómo ni cuánto tiempo debe pasar con su hijo, ni siquiera los Medias Blancas de Chicago.

Luego de una carrera de 12 años y a las puertas de la última temporada de su contrato por dos con Medias Blancas y en la que ganaría 13 millones de dólares, LaRoche decidió decir adiós y no precisamente porque se le haya agotado el entusiasmo por jugar beisbol.

El toletero decidió retirarse, porque consideró una afrenta el que los Medias Blancas le pidieran reducir el tiempo que su hijo Drake, de 14 años, pasa con él en las actividades de pretemporada del club.

Particularmente en el actual campamento de primavera, Drake ha estado presente en prácticamente todas las actividades de los Medias Blancas, incluidos los duelos de preparación en el dugout.

Ken Williams, presidente de la organización, fue quien le explicó a LaRoche que si bien la presencia de los hijos de los peloteros no está prohibida, en su caso, debía limitar las visitas de Drake a las actividades del equipo.

Williams y Laroche ya habían hablado al respecto días antes.

LaRoche, quien quizá tenía la idea de retirarse al final de la presente campaña y deseaba involucrar a su hijo en una pretemporada especial por este motivo, no soportó la sugerencia de Williams y decidió colgar el guante.

“Gracias Dios por el beisbol y por darme mucho más de lo que quizá merecía”, dijo LaRoche en un mensaje de Twitter acompañado del hashtag en inglés #FamilyFirst y que puede interpretarse sin duda como un anuncio de retiro.

En un tono conciliador, Williams lamentó la reacción de LaRoche, pero mantuvo su postura sobre el tema.

“Díganme en qué trabajo en Estados Unidos se le permite a alguien llevar a sus hijos todos los días”, dijo Williams a la página de internet de Fox Sports en Estados Unidos. “A veces, uno debe tomar decisiones que no son populares.

“Le dije a Adam que sólo redujera el tiempo que (Drake) pasa en el campo de entrenamiento. No creo que deba estaraquñi 100 por ciento del tiempo y (Drake) ha estado 100 por ciento del tiempo. Tampoco le dije que lo traiga sólo el 50 por ciento del tiempo. Algo en medio de esa medida”, añadió Williams.

Pues LaRoche decidió no llevar más a su hijo a las prácticas de los Medias Blancas y ni tampoco él.

LaRoche promedia .260 con el bate durante su carrera, en la que ha conectado 255 jonrones. Sin embargo, en 2015 batalló al batear para .207 y pegar sólo 12 cuadrangulares en 127 juegos, luego de pegar más de 20 vuelacercas los tres años anteriores.

Quizá consciente de que las lesiones y la edad –36 años—comienzan a hacerse notar, LaRoche decidió desde hace tres años convertir a Drake en su mejor amigo en el beisbol.

Pedirle que limitara la presencia de su confidente en su trabajo sólo provocó que LaRoche deseara dedicarle el 100 por ciento de su tiempo a Drake.

LaRoche señaló que se tomará unos días para analizar su futuro. Quizá encuentre la forma de repartir su tiempo entre su familia y su trabajo.